Los dirigentes lamentaron que los legisladores no comprendan la magnitud del problema y advirtieron de que, de no recibir respuesta, tomarán el poder Legislativo los próximos días.
“Por principio de humanidad, por piedad a la gente que lo ha perdido todo”. El presidente de la Federación de Asociaciones de Municipios de Bolivia (FAM-Bolivia), Flavio Merlo, reiteró su llamado a la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) para que apruebe, en los próximos días, los créditos indispensables para enfrentar los desastres naturales ocasionados por las intensas lluvias. Alertó de que, si la solicitud no es atendida a tiempo, los municipios se verán obligados a tomar la Asamblea.
“Necesitamos que se dejen de lado los intereses políticos y se priorice la humanidad de las personas afectadas (…) Los recursos no son para los bolsillos de los alcaldes ni del Presidente (Luis Arce), sino para ayudar a las familias que han perdido sus hogares, cultivos y medios de vida”, señaló Merlo, quien añadió que muchos parlamentarios no parecen comprender la magnitud del problema, ya que toman decisiones desde la comodidad de sus escritorios en lugar de visitar las zonas de desastre.
Politización
Los municipios de Bolivia, que ya se encuentran en una situación crítica, enfrentan una emergencia sin precedentes debido a los efectos devastadores del clima y la falta de recursos suficientes para atender las necesidades de las familias damnificadas.
El también alcalde del municipio paceño de Tiwanaku expresó su profunda preocupación por la situación que viven los municipios del país y la insuficiencia de fondos disponibles para hacer frente a la emergencia.
Según Merlo, más de 130 municipios a escala nacional se encuentran en una situación crítica debido a los desastres naturales, con pérdidas materiales y humanas que ya son incalculables.
En ese contexto, criticó duramente la actitud de algunos legisladores, quienes, según él, han politizado el tema de la aprobación de estos créditos destinados a atender emergencias, lo que ha generado “un retraso que podría tener consecuencias fatales para el país”.
“Estamos en emergencia, no tenemos los recursos necesarios. Los municipios han quedado completamente desbordados”, comentó el dirigente, quien detalló que los fondos solicitados —$us 75 millones de la CAF y $us 250 millones del Banco Interamericano de Desarrollo— son esenciales para atender las necesidades de las familias afectadas y enfrentar los desastres que continúan ocurriendo en varias regiones del país.
Por su parte, Neusa Coca, presidenta de la Asociación de Gobiernos Autónomos Municipales del Departamento de La Paz (Agamdepaz), hizo un llamado similar a los legisladores. Pidió que actúen con responsabilidad y empatía hacia las comunidades más vulnerables.
Sesión de la Asamblea Legislativa.
“Este no es un problema de colores políticos, es un problema de vida o muerte para miles de familias que lo han perdido todo. Los municipios ya no tienen recursos suficientes para atender las necesidades más urgentes”, afirmó Coca, quien resaltó que, en su departamento, La Paz, ya son 53 los municipios que se encuentran en estado de emergencia.
También destacó que la situación no solo afecta a La Paz, sino a otras regiones del país, como Pando y Trinidad, donde las lluvias y los desbordes de ríos han provocado la pérdida de cultivos, viviendas y bienes materiales.
La presidenta de Agamdepaz enfatizó en que los alcaldes y autoridades locales son los primeros en recibir las solicitudes de ayuda de las familias afectadas y, sin los recursos necesarios, no pueden cumplir con su responsabilidad de asistir a los damnificados.
Plazo
Recordó que en la reunión sostenida la pasada semana entre los con alcaldes de país, aglutinados en la FAM-Bolivia, se acordó dar un plazo de 15 días a la Asamblea Legislativa para que apruebe los créditos solicitados.
Si no hay respuesta positiva dentro de ese plazo, que según sus cálculos se cumple este 28 de marzo, ambos dirigentes advirtieron de que se coordinarán acciones con las organizaciones sociales para tomar la Asamblea.
“Vamos a ir con nuestras organizaciones sociales a exigir lo que corresponde. La Asamblea está eligiendo la política antes que la vida de las personas”, advirtió Coca.
Tanto Merlo como Coca insistieron en que la prioridad ahora debe ser salvar vidas y ofrecer asistencia a los damnificados. “Los cargos son temporales, pero las vidas humanas son irreemplazables. Si no actuamos ahora, cuando los alcaldes y asambleístas dejemos nuestros cargos, ¿qué cara les vamos a dar a la población?”, concluyó Merlo después de reiterar su llamado urgente a la reflexión y acción.
AEP
