El gobierno del presidente Luis Arce reafirmó su compromiso con la interdicción como una medida clave para combatir el tráfico de drogas y proteger la seguridad de la población, cumpliendo con los acuerdos internacionales en la lucha contra el narcotráfico.
El viceministro de Defensa Social y Sustancias Controladas, Jaime Mamani Espíndola, informó que, en cuatro años de gestión, Bolivia ha destruido 3.838 fábricas de pasta base de cocaína y 298 laboratorios de reciclaje y cristalización de clorhidrato de cocaína, como parte de los operativos de interdicción al narcotráfico realizados en el país.
“La mayor parte de estas fábricas y laboratorios fueron desmantelados en la región del Trópico de Cochabamba, donde la Unidad Móvil de Patrullaje Rural (UMOPAR) mantiene un control territorial efectivo”, explicó Mamani en una entrevista concedida al periódico Ahora el Pueblo.
La autoridad destacó que los operativos de interdicción, liderados por UMOPAR, no solo buscan combatir la producción y tráfico de drogas, sino también prevenir otros delitos conexos vinculados al narcotráfico.
OPERATIVOS EN EL TRÓPICO
El Trópico de Cochabamba es una de las zonas con mayor actividad relacionada con la producción de drogas en Bolivia. En esta región, UMOPAR ha intensificado su presencia, ejecutando operativos orientados a desmantelar fábricas clandestinas y laboratorios que procesan pasta base y cristalizan clorhidrato de cocaína para el tráfico internacional.
“Las operaciones continuarán en esta región estratégica, priorizando la interdicción en áreas donde las actividades ilícitas representan una amenaza significativa”, señaló el viceministro.
La Estrategia Nacional de Lucha contra el Narcotráfico 2021-2025 establece como prioridad el desmantelamiento de infraestructura dedicada a la producción de drogas, además de fortalecer la cooperación internacional y la erradicación de cultivos excedentarios de coca.
El gobierno boliviano reafirmó su compromiso con la interdicción como una medida clave para combatir el tráfico de drogas y proteger la seguridad de la población, cumpliendo con los acuerdos internacionales en la lucha contra el narcotráfico.
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