En cumplimiento a la Ley 954 del 14 de junio de 2017 se regula el servicio militar voluntario en el Estado Plurinacional de Bolivia. Obligatorio para varones y voluntario para las damas desde los 18 años.
La Paz, 03 de abril de 2023 (AEP).- “Las damas que quieren ingresar al cuartel, que se animen. Se vive una bonita experiencia al servir a la patria”, afirmó la dragoneante Eliana Quispe, quien presta su servicio militar voluntario en el Batallón de Comunicaciones Vidaurre, en la ciudad de La Paz.
Al igual que Eliana, muchas mujeres en el país optan por desarrollar esta actividad. En los últimos cinco años (2018-2022) al menos 10.331 señoritas prestaron su servicio a la patria en 10 cuarteles del territorio nacional y en tres modalidades: servicio militar voluntario, el servicio premilitar voluntario y servicio militar voluntario SAR-FAB y SBRAB.
El director general territorial militar del Ministerio de Defensa, Miguel Romero, explicó que el servicio militar voluntario para damas comenzó en 1997 con los premilitares de acuerdo con el Decreto Supremo 24527, que en el primer artículo establece el servicio premilitar voluntario para estudiantes de cuarto curso del nivel secundario en las guarniciones de las grandes y pequeñas unidades del Ejército, brigadas, grupos aéreos y batallones navales.
Señaló que el servicio militar voluntario es diferente al premilitar por la cantidad de horas de servicio e instrucción que se imparte, pues se trata de 365 días de permanencia dentro de la unidad en el marco del servicio militar voluntario.
En cumplimiento a la Ley 954 del 14 de junio de 2017 se regula el servicio militar voluntario en el Estado Plurinacional de Bolivia. Obligatorio para varones y voluntario para las damas desde los 18 años.
El primer licenciamiento se hizo en enero de 2019 en el gobierno del presidente Evo Morales, y fueron 130 primeras mujeres que han estado en los cuarteles 365 días en el servicio militar voluntario.
El servicio voluntario para damas existe en las tres fuerzas tanto en el primer y segundo escalón, en la actualidad hay cinco unidades del Ejército, tres en la Fuerza Aérea Boliviana y dos en la Armada Boliviana.
En el Ejercito están el Batallón de Comunicaciones Vidaurre, en La Paz; el Regimiento de Infantería III Pérez, en Potosí; Batallón de Ingeniería V Ovando, Sucre; Batallón de Logística Heroínas Rabonas, en Oruro. En la Fuerza Aérea: Gala 92 en La Paz; Gala 93 Santa Cruz y Gala 94 Cochabamba.
En la Armada Boliviana: Batallón de Infantería de Marina 7, Columna Porvenir en Cobija, Batería de infantería Tocopilla en Trinidad. Regimiento de Cacique Juan Maraza ubicado en la localidad de Ichoa, Chapare, Cochabamba, donde están 54 mujeres que se especializan en ramas técnicas, técnico auxiliar en agropecuaria, agroforestal, técnico auxiliar en guardaparques, y turismo comunitario, detalló Romero.
En otras unidades las soldados se capacitan en ramas como auxiliar en Sanidad, Gastronomía, computación, contabilidad en coordinación con unidades del Ministerio de Educación.
“La finalidad de nuestro Ministerio de Defensa y del Gobierno es que la juventud boliviana se prepare para la vida, inculcándoles valores, responsabilidad, perseverancia, lealtad, el objetivo de impulsarlas a que deben tener una profesión a nivel licenciatura y afrontar los retos y así tengan un arma para defenderse en la vida y no ser humilladas por los varones, como son sus parejas”, dijo.
Manifestó que desde que se implementó el servicio militar voluntario de damas, el desenvolvimiento de ellas es excelente. Demuestran mayor responsabilidad, son las primeras en cumplir todas las disposiciones que dictan sus superiores.
La incorporación de las damas al servicio militar, premilitar voluntario tiene el objetivo de dar cumplimiento a la igualdad de oportunidades y de género.
“Felicitamos a nuestras damas que hoy están cumpliendo su servicio militar o premilitar voluntario en las unidades de las tres fuerzas; que sigan adelante con el mismo empeño y perseverancia para el bien de ellas y de la sociedad. El servicio que hacen engrandece nuestra Bolivia”, expresó Romero.
El servicio militar voluntario SAR-FAB Y SBRAB está destinado para las mujeres universitarias o profesionales de 18 a 30 años. Son voluntarias en los grupos de búsqueda y rescate de la Fuerza Aérea Boliviana (SAR-FAB) o Armada Boliviana (SBRAB), quienes coadyuvan en las tareas de apoyo a la comunidad y contribuyen al desarrollo integral del Estado. Al finalizar su permanencia de dos años con una asistencia todos los sábados se les entrega la libreta de servicio militar serie A.
Daniela y Eliana cuentan sus motivaciones para sumarse a las filas castrenses
La curiosidad o demostrar a la familia o al entorno que la mujer sí puede servir a la patria. Esos fueron los impulsos de Daniela Cortez y de Eliana Quispe para sumarse a las filas militares.
Daniela es bachiller de la unidad educativa Rafael Pavón de la ciudad de El Alto, es la segunda de tres hermanas, optó por el servicio militar voluntario en el Batallón de Comunicaciones Vidaurre, en la ciudad de La Paz, y ahora es dragoneante por su destacado desempeño.
“He aprendido cosas que tal vez en la vida civil nunca lo voy a hacer, el manejar un fusil, orden cerrado, saber liderar. He aprendido aquí todos los valores, la puntualidad, responsabilidad, valorar a nuestros padres”, afirmó.
Su interés en hacer el servicio voluntario a la patria se basó en tener conocimiento de cómo es la vida militar y también demostrar que las mujeres pueden incluso ser mejores que los varones.
Eliana Quispe tiene 18 años, es de los Yungas, salió bachiller del colegio Luis Espinal, tiene cinco hermanos mayores, sus padres son agricultores.
“Las damas que quieren ingresar al cuartel, que se animen. Es una bonita experiencia el servir a la patria”, afirmó la dragoneante, quien desarrolla su servicio militar voluntario en el Batallón de Comunicaciones Vidaurre.
“Quiero demostrar a mi familia que una dama puede servir a su patria. No solo los varones pueden ingresar al cuartel, las damas también podemos, no nos diferenciamos mucho con ellos, tal vez podemos ser mejor que un varón”, manifestó.
La instructora suboficial Pamela Quenta Onofre, del Comando de Telecomunicaciones Vidaurre, destacó que las mujeres tienen la misma instrucción que los varones en cuanto a orden cerrado, disciplina. La formación militar es la misma, permanecen las 24 hora del día los 365 días del año, pasan instrucción junto a sus compañeros varones, solo en el descanso tienen sus área respectivas.
“Se despiertan a las 5 de la mañana, empezamos con el aseo y el desayuno, después el parte de instrucción y se da inicio a la capacitación programada, técnica de armas tiro, luego el almuerzo, aseo nuevamente, y retornamos con la instrucción física, la cena y por la noche instrucción teórica, finalmente el parte de retretas y descanso a las nueve de la noche”, detalló.
Las mujeres que quieren servir a la patria generalmente entran para saber cómo es el cuartel y luego les nace la vocación de la vida militar y crecer física y mentalmente, señaló.
De ahí es que muchas deciden ingresar a la carrera militar porque ya adquirieron conocimientos que les permiten decidir sobre su futuro y si quieren seguir aprendiendo y ponerse al servicio de los bolivianos.