Añez autorizó la compra de los 500 equipos, 170 llegaron al país y fueron adquiridos por casi $us 27 mil cada uno, cuando el costo real era de $us 7.194.
El portavoz presidencial, Jorge Richter, lamentó la indiferencia de las más altas autoridades de la Iglesia Católica ante el dolor de las víctimas.








