Cuatro policías murieron en los puntos de bloqueo. El Gobierno apunta a exautoridades y líderes originarios como autores intelectuales del ataque.
El conflicto escaló a niveles críticos con ataques armados y el uso de explosivos. El Gobierno denuncia acciones criminales y llama a resistir la violencia promovida por Evo Morales.
El viceministro de Régimen Interior, Jhonny Aguilera, denunció que grupos afines al evismo, que protagonizan los bloqueos en Llallagua (Potosí) estarían vinculados al narcotráfico.
El presidente Luis Arce destacó el restablecimiento del control y la paz social en el municipio potosino, que fue asediado por bloqueadores evistas.
Plantaciones de marihuana y laboratorios de cocaína convierten el área en una “zona roja”.
