El alcalde Iván Arias prometió por cuatro años consecutivos lanzar una convocatoria para la industrialización de la basura en La Paz.
Luego de la inauguración de una nueva celda, el relleno sanitario de Sak’a Churu estará en funcionamiento hasta 2026; sin embargo, esto significa una extensión de cinco años respecto al cierre, previsto para 2021, cuando fue inaugurado en 2019 como una solución temporal.
Con la apertura de este nuevo espacio —que tiene cinco hectáreas, de las cuales dos ya están en uso— Sak’a Churu continuará acogiendo cerca de 650 toneladas de basura diarias por los próximos dos años.
Una de las principales promesas del alcalde Iván Arias durante su campaña, que se llevó a cabo exactamente en 2021, fue la industrialización de la basura. Tres años más tarde, lo único que se vislumbra son las promesas de lanzar licitaciones al respecto, situación que tampoco ha dado resultado hasta ahora.
“Tenemos 200 millones de dólares, tenemos el financiamiento para que toda la basura, papel, cartón, sobras de comida entren al proceso pirólisis y va a salir petróleo”, dijo Arias en julio de 2022, cuando anunció el lanzamiento de las convocatorias.
En febrero de 2023, el burgomaestre afirmó que la industrialización de residuos sólidos sería el “superproyecto” del año. Repitió que se lanzaría una convocatoria nacional e internacional; sin embargo, en esta ocasión, el presupuesto ya no era de 200 millones, sino de 20 millones de dólares.
Este año señaló que en agosto se hará pública esta licitación, con la que se busca que la basura sea convertida ya no en petróleo, sino en energía, y se apunta a las empresas de cemento, como Soboce, para que al fin se haga realidad el proyecto.
“Entonces, ¿qué hemos hecho durante este tiempo? Hemos ido hablando con las cementeras, y las cementeras dicen: ‘La mejor forma de generar energía es mediante la basura’”, aseveró el burgomaestre en la inauguración de la nueva celda del relleno sanitario.
Mientras tanto, al pueblo paceño le cuesta Bs 30 millones al año el trabajo que se realiza tanto en Alpacoma como en Sak’a Churu, además de lo que ya se invirtió en la nueva celda, que llega aproximadamente a los Bs 6 millones.
La Paz/AEP