En un emotivo acto presidido por el mandatario Luis Arce se inauguró recientemente un nuevo edificio del Banco de Desarrollo Productivo (BDP), una entidad que se erige como un bastión esencial del Modelo Económico Social Comunitario Productivo (MESCP) en Bolivia.
Desde su fundación, el BDP ha trascendido el simple desembolso de créditos para convertirse en un verdadero aliado del productor boliviano.
En línea con la Ley de Servicios Financieros, este banco se ha erigido como un amigo del productor, brindando no solo financiamiento, sino también asistencia técnica crucial para mejorar la productividad y la calidad de la producción en el país.
La trayectoria del BDP está marcada por un constante desarrollo de productos financieros adaptados a las necesidades específicas de diversos sectores, destacando especialmente los créditos diseñados para mujeres y jóvenes emprendedores.
Iniciativas como Jefa de Hogar, Semilla Mujer y Jóvenes Emprendedores han allanado el camino para la inclusión económica y el empoderamiento de estos grupos en la sociedad boliviana.
Pero el compromiso del BDP va más allá de la inclusión social. La entidad ha desempeñado un papel crucial en la promoción de la sostenibilidad y la innovación en sectores estratégicos como la agricultura y la energía.
Programas como BDP Eficiencia y Agro BDP han permitido impulsar la adopción de prácticas de agronomía de precisión y la sustitución de energías, contribuyendo así a un desarrollo económico más equitativo y sostenible.
El Ministerio de Economía y Finanzas Públicas destacó la evolución del BDP desde su creación en 2006 hasta el presente, subrayando su papel fundamental en la diversificación y el fortalecimiento de la economía boliviana.
El hecho de que el Banco cuente ahora con un edificio propio es un símbolo tangible del éxito y la solidez de esta institución financiera.
En un momento crucial para la economía boliviana, el Banco de Desarrollo Productivo emerge como un pilar indiscutible del progreso y la estabilidad del país.
Su compromiso con el desarrollo inclusivo, sostenible e innovador refleja los valores fundamentales del Modelo Económico Social Comunitario Productivo, consolidando así un futuro próspero y prometedor para Bolivia y sus ciudadanos.