Una ola de altas temperaturas afecta al mundo. El calor extremo es uno de los signos más claros del cambio climático porque los seres humanos queman combustibles fósiles que calientan el planeta. Las altísimas temperaturas son el resultado de un domo de calor que se produce cuando una cadena de altas presiones se acumula sobre una zona y permanece durante días o incluso semanas atrapando el aire caliente.
El Niño, un patrón climático natural que se origina en el océano Pacífico tropical, también ha disparado el calor, al igual que la tendencia subyacente del calentamiento global causado por el hombre.
Este año, el hemisferio norte vivió el verano más caluroso jamás registrado: junio, julio y agosto batieron récords mundiales de calor mensual.
Como el calor anormal continúa, las señales apuntan a que septiembre será también el mes más caluroso jamás registrado.
Según la Administración Nacional de la Atmósfera y los Océanos de Estados Unidos, hay más de un 93% de probabilidades de que este año sea el más caluroso jamás registrado.
Otras zonas del hemisferio sur también experimentan una primavera excepcionalmente calurosa, como Australia, que se enfrenta a temperaturas inusualmente altas y a decenas de incendios forestales. El país está viviendo un septiembre sin precedentes, después del invierno más cálido jamás registrado.
Entre junio y agosto, el 98% de la humanidad experimentó temperaturas propiciadas por el cambio climático, según un reciente análisis del grupo de investigación climática Climate Central.
En Bolivia el calor afecta a siete de los nueve departamentos. La Paz registró 27 grados el 26 de septiembre, un récord sin precedentes, mientras que en la sureña zona del chaco la temperatura llegó a 45 grados.
El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología informó que la ola de calor afecta a los departamentos de Beni, Pando, Chuquisaca, Cochabamba, La Paz, Santa Cruz y Tarija.
Esas son consecuencias del calentamiento global que aumenta su duración, su frecuencia y su intensidad.
Mientras el calor extremo golpea al mundo entero, los científicos advierten de que esta podría ser una nueva realidad.