En días pasados, el rector de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (UAGRM), Vicente Cuéllar, anunció la rearticulación del Comité.
Interinstitucional de Santa Cruz, el mismo que promovió el paro cívico de 36 días en esa región, entre octubre y noviembre de 2022, que estuvo marcado no solo por generar un serio perjuicio a la economía cruceña y boliviana, sino también por los múltiples hechos de violencia e incluso el fallecimiento de ciudadanos durante aquellos aciagos días.
Cabe recordar que durante esas jornadas las diferencias en el interior del Comité estuvieron a flor de piel, con amenazas de muerte civil dirigidas claramente al rector del UAGRM, Vicente Cuéllar, por parte del gobernador Fernando
Camacho. Este último fue conminado a que no brinde declaraciones debido a su “temperamento”, un eufemismo utilizado por el vocero de la citada casa de estudios superiores, Manfredo Bravo, en alusión a los problemas que generaba el excívico cada vez que tenía palestra, entre otros aspavientos.
Ahora la gran pregunta es ¿para qué se rearticula el Comité Interinstitucional? Según dijo el propio Vicente Cuéllar, el Comité Interinstitucional de Santa Cruz retomará sus actividades el martes 18 de abril, con temas en agenda como justicia, Gestora Pública y educación. Sin embargo, resulta casual que los promotores del paro de Santa Cruz, el excívico Rómulo Calvo, el rector Cuéllar, el vicerrector Reinerio Vargas y el asesor legal del Comité, José Luis Santistevan, fueron convocados por la Fiscalía a declarar justamente por los 36 día de paro que promovieron.
Ante este panorama, surge otra pregunta: ¿no será que los citados a la Fiscalía quieren rearticular el Comité Interinstitucional para buscar impunidad bajo la excusa de defender temas de “interés ciudadano? De hecho, no sería la primera vez que el Comité asume posturas políticas escudado en supuestas reivindicaciones de la población. Así pasó con el tema del Censo, cuyo paro, al margen de promover la violencia y generar daño económico, no tuvo mayor impacto y mucho menos beneficio.
Solo queda esperar que esos difíciles momentos por los que pasó la población cruceña, principalmente aquellas personas que generan recursos con el trabajo del día a día, no se vuelvan a repetir, y que no se utilice a la ciudadanía con engaños para atender los intereses personales y políticos de unos cuantos.