El Gobierno nacional demostró una vez más que cumple su compromiso con el pueblo boliviano luchando de manera frontal, a través de acciones concretas, contra el agio y la especulación en los precios de los productos de la canasta familiar.
Las acciones asumidas para frenar el incremento de las verduras como el tomate, la cebolla, el locoto y otros productos de la canasta familiar lograron que los precios se normalicen en el mercado interno.
Los controles no solo en los mercados de abasto, sino también en las fronteras que unen Bolivia con otros países vecinos principalmente de la Argentina, Perú y Brasil evitaron que se trasladen de manera ilegal los productos como el arroz, el tomate, la cebolla, y otros que generaron sobredemanda, especulación y agio.
Este logro del Gobierno en casi más de dos semanas de intenso trabajo por parte de diversas instituciones que conformaron el Comité Interinstitucional de Seguridad Alimentaria permitió garantizar el abastecimiento de los alimentos para todos los bolivianos.
Sin duda alguna, está claro que el Gobierno nacional cumple su compromiso con los bolivianos de abastecer los alimentos de la canasta familiar y, por ello, frente a la elevación de los productos de la canasta familiar en los mercados, el
Ejecutivo reactivó en abril el Comité Interinstitucional de Seguridad Alimentaria para evitar el agio y la especulación.
Este Comité está integrado por el Viceministerio de Lucha Contra el Contrabando, el Viceministerio de Comercio Interno, el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag), Desarrollo Rural, Defensa del Consumidor, las Fuerzas Armadas y la Policía Boliviana, a fin de tomar acciones conjuntas que permitan vigilar no solamente los precios, sino también controlar a aquellas personas que estarían cometiendo irregularidades para emitir sanciones.
A partir de esta conformación del Comité, las instituciones estatales decidieron reforzar los controles en los puntos fronterizos en el país, en los mercados de abasto y en ingenios para evitar que se oculten o trasladen los productos de manera ilegal.
A estas acciones se sumaron otras de vital importancia, que ayudaron a que el precio de los alimentos se regularice, como ser las ferias Del Campo a la Olla, organizadas por parte del Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, las ferias barriales y zonales por parte de Emapa, la venta de los productos a peso y precio justo en todos los supermercados y tiendas de Emapa, entre otros mecanismos.