La población del departamento de Santa Cruz de la Sierra festejó el 213 aniversario de su grito libertario de 1810 con desfiles, sesiones de honor, iza de su bandera, ofrendas florales, condecoraciones, coronación de su reina y una misa (tedeum); sin entrega de obras de impacto de su gobernador Luis Fernando Camacho Vaca, detenido preventivamente en la cárcel de Chonchocoro por la comisión e imputación de varios delitos; resultando dicho festejo, como nunca antes.
Prosiguiendo con la celebración, el presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, entrevistado por los medios de comunicación, pidió en calidad de regalo por dicho aniversario que el Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia ponga en libertad a Luis Fernando Camacho y los políticos detenidos, que no construya la carretera Buena Vista-Las cruces y otras estupideces difíciles de creer, por carecer de raciocinio y lucidez.
La falta de entrega de obras de impacto y la falta de gestión dio lugar a que Amdecruz, la Federación de Interculturales de Santa Cruz y la mayoría del pueblo que vive en dicho departamento anunciara la iniciación de procesos penales contra su gobernador Luis Fernando Camacho por el delito de incumplimiento de deberes penado por el Art. 154 del Código Penal y otros delitos; porque no saben en qué se utilizó ni en qué se utiliza el presupuesto destinado a la gobernación cruceña, y que su gobernador solo se ha dedicado a conflictuar la vida política y social del país con los 36 días de paro y bloqueo, con un saldo de aproximadamente $us 140 millones de daño económico, entre otros, y actualmente se opone a la construcción de la carretera Buena Vista-Las Cruces, prometida y aprobada por el mismo gobernador; impidiendo así el progreso y el vivir bien de la población de dicho departamento, con caprichos, mentiras, intereses personales y de grupo.
Esa manera de festejar no parece ser propiamente un festejo, sino una muestra de vergüenza ajena, arrepentimiento y resignación —desde el punto de vista psicológico— de todos los hechos cometidos por los malos políticos de esa noble tierra, que tiene gente culta, de bien y patriota, y es digna de mejor suerte; gente que seguramente siente vergüenza de festejar su aniversario con su gobernador Luis Fernando Camacho detenido por imperio de las leyes en la cárcel de Chonchocoro, y otros detenidos y detenidas en la cárcel de Palmasola imputados por hechos de corrupción ampliamente conocidos. Urge que los psicólogos expliquen si es posible festejar teniendo vergüenza de los politiqueros que perjudican el progreso de Santa Cruz con actos antipatrióticos y delictivos.
Entretanto, el Gobierno central presidido por Luis Arce Catacora entregó obras destinadas a la industrialización, en el municipio de San Miguel de Velasco, para la construcción y equipamiento de la primera Planta Procesadora de Yuca; en la comunidad Potrero Aguilar de San Miguel de Velasco entregó cuatro sistemas de agua subterránea y radiobases; entregó dos unidades educativas en la comunidad de Aguas Calientes del municipio de Roboré; entregó la carretera internacional El Espino-Charagua-Boyuibe; inauguró la Casa de las Culturas, entre otras, que fueron festejadas por el pueblo de Santa Cruz; obras que inexplicablemente no son valoradas por los políticos golpistas y fascistas de Santa Cruz, que solo falta que no festejen la construcción del Complejo Siderúrgico del Mutún, que ya es realidad en 80% y pronto será inaugurado.
Con esa manera de festejar, se puede decir que a los políticos golpistas de Santa Cruz no les importa el desarrollo y progreso de su departamento; lo que les importa es que el pueblo esté confundido por las mentiras que les dicen, para dar un golpe de Estado como en 2019 y gobernar como lo hicieron durante el mandato de Jeanine Añez, despreciando, masacrando y matando a los aymaras, quechuas y tupi guaraníes, que constituyen el 85% de la población de Bolivia, considerándolos seres inferiores y sin derechos.
