Una vez finalizado el proceso, se iniciará la recolección de las pruebas y se hará la convocatoria de los testigos.
La Corte Suprema de Brasil ha imputado a unos 1.176 participantes en los actos golpistas del 8 de enero, cuando miles de partidarios del expresidente Jair Bolsonaro asaltaron las sedes de los tres poderes en un intento de forzar un golpe de Estado contra el mandatario electo Luiz Inácio Lula da Silva.
El Supremo Tribunal Federal (STF) anunció que se alcanzó esa cifra cuando concluyó el análisis virtual de las denuncias de la Fiscalía contra otros 131 acusados, a los que consideró procedentes para abrirles un juicio penal.
La apertura de los procesos la aprobaron ocho de los 10 magistrados que integran el Tribunal, los únicos en contra resultaron Kassio Nunes Marques y André Mendonça, cuyo nombramiento fue indicado por el entonces presidente Bolsonaro.
Hoy miércoles la Corte Suprema iniciará el análisis de las acusaciones contra el séptimo y último grupo de los 1.390 denunciados formalmente por la Fiscalía por participar en la intentona golpista.
Una vez concluido el proceso, se iniciará la recolección de las pruebas, la convocatoria de los testigos y la lectura de las alegaciones de defensa y acusación.
Hasta ahora, de los 1.176 imputados, 951 fueron acusados por asociación para delinquir e incitación pública contra las Fuerzas Armadas y los poderes constitucionales por haber participado en los campamentos que los bolsonaristas montaron frente al cuartel general del Ejército para pedir un golpe de Estado y desde donde se dirigieron a los asaltos.