El expresidente fue extraditado de EEUU y comparte encierro con Alberto Fujimori y Pedro Castillo.
El expresidente de Perú Alejandro Toledo ya fue recluido en el penal de Barbadillo, ubicado dentro de la Dirección de Operaciones Especiales (Diroes) del distrito de Ate, en la provincia de Lima, donde también están los exmandatarios Alberto Fujimori y Pedro Castillo.
Toledo, quien fue extraditado desde EEUU hasta Perú para enfrentar los cargos en su contra por colusión, lavado de activos y tráfico de influencias durante su gobierno (2001-2006), se convirtió en el cuarto exjefe de Estado peruano que es privado de libertad en Barbadillo, por la condena de 18 meses de prisión preventiva.
Desde 2007 allí reside Fujimori, quien estrenó el recinto penitenciario y consuma una pena de 25 años de cárcel por crímenes de lesa humanidad. Entre julio de 2017 y abril de 2018 estuvo el exdignatario Ollanta Humala en prisión preventiva, por el supuesto pago de aportes irregulares en campaña electoral.
Mientras que, desde diciembre del año pasado, Castillo también cumple prisión preventiva acusado de rebelión y conspiración, por su intento de disolver el Congreso de la República y su presunta participación en una organización criminal como líder de una trama de corrupción en su gobierno.
De esta forma, Barbadillo se ha erigido en la única prisión del mundo que alberga a tres expresidentes. “Tenemos las condiciones para recibirlo, eso está fuera de dudas”, declaró el jefe del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Javier Llaque, al local Canal N, en referencia a Toledo.
La cárcel de Barbadillo
Su construcción se anunció en la década de 1980, cuenta con aproximadamente 800 metros cuadrados de amplitud, está resguardada por veinte agentes policiales del INPE y, aunque en un momento fue pensada exclusivamente para Fujimori, autoridades han confirmado que los políticos no coinciden.
Llaque indicó previamente que tanto Fujimori como Castillo tienen permiso para salir entre dos y cuatro horas diarias. Cada celda tiene un jardín, una habitación con baño privado y una pequeña sala de visitas con tres sillas y una mesa.
También cuenta con una huerta donde pueden cultivar algunas hortalizas. De hecho, según el canal América, el profesor cajamarquino siembra papas, camotes y maíz. Fujimori, algunas rosas.
Igualmente, la Diroes emplea enfermeras las 24 horas del día para garantizar la salud de los sentenciados.
Las condiciones de Toledo
El abogado de Toledo, Roberto Su, declaró a la prensa que su representado no goza de “ninguna comodidad”.
“El expresidente Toledo me dijo que tiene una cama, colchón, juego de sábanas, pero no tiene ningún artefacto, ninguna comodidad, ni una silla”, dijo.
Señaló que no pudo ver a Toledo porque una comisión médica le hacía una evaluación. El abogado indicó que han solicitado que sus doctores organicen una junta médica para evaluar si Toledo tiene cáncer, en compañía de “médicos particulares que lo han tratado en el Perú”.