"Hoy son jóvenes los convocados, pero la mayoría no tienen un buen recorrido, no tienen un buen respaldo de haber jugado partidos internacionales en divisiones menores y sus equipos, y eso le puede jugar en contra al entrenador Costas."
Hay confianza en el trabajo que pueda desarrollar el entrenador de la Selección Gustavo Costas para mejorar el fútbol nacional, siempre y cuando los futbolistas respondan en la parte física, que es el peor déficit que tiene el balompié boliviano, según el análisis del exmundialista Luis Héctor Cristaldo.
—¿Cómo ve a la actual Selección boliviana?
—La Selección empezó un nuevo proceso, una nueva ilusión. Siempre voy a desear que le vaya bien, espero que empecemos con el pie derecho, así sea en partidos amistosos. Que le vaya muy bien al profesor Gustavo Costas en este nuevo reto. Además es lo que queremos todos los bolivianos.
Es prematuro pedir algo pero esperemos que en los dos amistosos que juegue contra Uzbekistán y Arabia Saudita la Selección muestre progresos, que se vea un cambio de actitud y la manera de jugar del equipo nacional.
Hasta ahora solo he escuchado declaraciones mesuradas de Costas, cosa que no ocurrió con el anterior técnico que nos vendió humo desde un comienzo y después sacó puntos de pura suerte. Esperemos que esta vez no sea así.
—¿El partido con Perú no es un parámetro?
—No, porque Costas no estaba dirigiendo. Ahora con él al mando del equipo es otra cosa, ya les está transmitiendo a los jugadores la idea de juego que pretende implementar en la Selección y de aquí para adelante ya podremos hacer valoraciones más concretas sobre su trabajo.
Lastimosamente hay que ver lo que han hecho nuestros equipos en la Copa Libertadores, porque es el reflejo de lo que pasa en el torneo local, además hay jugadores que han sido convocados a la Selección y eso preocupa.
Ya hemos visto lo que pasó con Nacional Potosí y Always Ready, pero no es por culpa del jugador, del técnico ni de los dirigentes, sino es por la falta de formación en la parte física en Bolivia.
No voy a criticar la inteligencia, la calidad técnica, los deseos y las ganas que tiene el futbolista en Bolivia por lograr cosas importantes; pero si desde abajo no tenemos una buena formación en la parte física, no vamos a poder alcanzar los objetivos porque los equipos de afuera nos superan fácilmente en ese aspecto, no estamos a la altura y eso es muy preocupante.
Si no estamos bien preparados en esa parte, que para mí es la base de todo, estamos fregados y no vamos a salir adelante.
—¿Los amistosos contra Uzbekistán y Arabia Saudita son un duro examen para Costas?
—Sí, con toda seguridad. Se va a jugar contra una selección mundialista que le ganó a Argentina, el actual campeón mundial, y la otra es una selección cuya categoría Sub-20 está jugando la final del torneo de Asia, donde se vio un buen plantel y considero que el de mayores debe tener el mismo rendimiento.
De lo que muestre la Selección dentro de la cancha, más allá del resultado, veremos cómo llegaremos a septiembre, cuando se inicien las Eliminatorias, aunque muchos lo ven lejos pero no es nada, porque una Selección para formarse bien necesita mucho tiempo, años; por tanto, esperemos que haga una buena presentación y lo que muestre nos ilusione a todos viendo el juego que propone Costas.
—Con la propuesta de Costas, de jugar un fútbol intenso, con buena tenencia de la pelota, presión y precisión, ¿se cambia el fútbol boliviano?
—La propuesta de Costas es la mejor, pero no sé si él está al tanto de la formación que tiene el futbolista boliviano en la parte física porque, para hacer todo lo que quiere, los jugadores que convoque a la Selección tienen que estar físicamente a la altura de las exigencias de un partido internacional, ya que lo que se muestra en el fútbol doméstico no alcanza para practicar un fútbol intenso, además que el rival está muy bien preparado en ese aspecto.
Desde mi óptica y como conocedor del fútbol boliviano lo veo difícil que lo pueda lograr, porque nuestros futbolistas no tienen una buena formación en la parte física y eso se trabaja desde abajo.
Lo que pasó con Nacional y Always en la Copa Libertadores es una muestra. Por ejemplo, el equipo de Magallanes se lo pasó por encima a Always, en la ida y en la vuelta, porque estaba mejor preparado en la parte física, avanzó de fase y se topó contra un club colombiano que lo paseó porque estaba mucho mejor en lo físico.
—¿En la lista de convocados a la Selección están los que deben estar o faltan algunos?
—Cualquier entrenador va a buscar lo mejor que tiene en el momento porque la Eliminatoria es larga. Por ahí Marcelo Martins no llegué hasta el final pero te puede servir para los primeros partidos, te puede hacer ganar un partido y después tal vez ya no le dé el cuero por más ganas que tenga, porque se juega cada tiempo, no es seguido. Para el jugador es el presente, no lo que ha hecho hace una semana, es de todos los días.
Lo que convocó Costas es lo mejorcito que hay en este momento en Bolivia, no hay más, hay que apoyar y no darle palo diciendo que falta uno u otro, eso está demás. Más adelante aparecerán otros, nunca se sabe.
¿Es una selección joven?
—No son tan jóvenes, siempre se necesita una Selección equilibrada; no se puede hacer un cambio de raíz, eso se tiene que hacer en las divisiones menores, es ahí donde se tiene que hacer un cambio profundo, pero eso no existe en nuestro fútbol.
Por mi experiencia propia puedo transmitir tantas cosas dirigiendo a un equipo Sub-15, Sub-17, Sub-20, sé cómo se debe desarrollar un trabajo porque competí desde mis 11 años. Jugué en la Sub-12, Sub-15, Sub-17, Sub-20 y llegué con 19 años a la Selección mayor, porque quemé todas las etapas y no me costó adaptarme a una Eliminatoria
Esas experiencias se viven gracias a los buenos técnicos que he tenido, las tengo presente y quiero transmitirlas pero nadie me da la posibilidad de contar todo lo que pasé, no les interesa.
En la Selección del 93 fuimos siete chicos de 20 a 22 años pero con un buena trayectoria, y esos éramos Jaime Moreno, Juan Manuel Peña, Marco Etcheverry, Erwin Sánchez, Juan Carlos Ríos, Iván Castillo y mi persona, quienes ya habíamos jugado Libertadores y campeonatos sudamericanos.
Hoy son jóvenes los convocados, pero la mayoría no tienen un buen recorrido, no tienen un buen respaldo de haber jugado partidos internacionales en divisiones menores y sus equipos, y eso le puede jugar en contra al entrenador Costas.
—¿Qué espera de la Selección?
—Que clasifique al Mundial. Me gustaría ir a verlo en el Mundial 2026.
