El fiscal superior Jorge Chávez informó que quedaban cuatro inculpados todavía libres.
El presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Agustín Lozano, fue detenido ayer por los delitos de fraude, corrupción, lavado de activos, por los cuales puede ser condenado a 20 años de prisión.
En la operación, ejecutada en Lima y otras ciudades, fueron capturados otros siete involucrados en el caso, entre ellos Joel Raffo, presidente del club Sporting Cristal, uno de los más prestigiosos de Perú, y Víctor Roja, titular del club Sport Huancayo.
También fueron detenidos en Lima Sabrina Martín, Joel Raffo, Jean Robilliard, Norma Alva, Freddy Salazar, Karen Mandriotti y Juan Quispe Cáceres, dirigentes o empleados de la FPF, y en el interior Humberto Miñán José Carlos Isla y Franklin Chuquisuta.
Además, luego de una investigación del Ministerio Público de más de un año, la Policía Nacional allanó la casa de Lozano, las instalaciones de la FPF y 16 inmuebles en las ciudades de Lima, Tumbes, Piura, Chiclayo, Chachapoyas y Huánuco.
El fiscal superior Jorge Chávez informó que quedaban cuatro inculpados todavía libres.
15 días detenidos
Señaló que las detenciones tienen carácter preliminar y regirán por 15 días, periodo en el que continuarán las pesquisas para fundamentar o no una prisión preventiva más prolongada.
Chávez señaló que, por la gravedad de los cargos que se le atribuyen, Lozano puede ser condenado hasta a 20 años de cárcel y descartó que la operación atente contra la autonomía y la condición de entidad privada de la FPF.
“La FPF no es una embajada, no goza del principio de extraterritorialidad; si hay personas que cometen un ilícito, tienen que ser investigadas por las autoridades, y el fiscal ha hecho una investigación objetiva, respetando el derecho a defensa”, dijo.
El experto en derecho deportivo José Luis Noriega añadió que la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) y la Confederación Suramericana de Fútbol (Conmebol) solo prohíben la intervención de los estados en temas estrictamente deportivos.
Según otras fuentes del Ministerio Público, los delitos imputados fueron cometidos con la entrega irregular de fondos o prebendas a ligas regionales y clubes a cambio de votos de respaldo a las decisiones y la reelección de Lozano, modalidad que existe desde hace muchos años.
Reventa de entradas
Noriega señaló que la corrupción bajo Lozano tiene tal magnitud que incluye el alquiler de los alojamientos del Centro de Alto Rendimiento, la reventa de entradas para partidos de las eliminatorias premundialista y la venta de zapatillas donadas por auspiciadores para las selecciones de fútbol de menores.
El titular de la FPF asumió el cargo en 2018, luego de ser sometido a prisión preventiva su antecesor Edwin Oviedo, por un proceso penal ajeno a la entidad deportiva.
La Paz/AEP