El preparador físico Mauricio Gonzales afirma que en El Alto habrá un rendimiento óptimo.
Un aspecto fundamental en el fútbol es la preparación física y la Selección nacional no goza de buena salud en ese aspecto, pero la adaptación fisiológica al medio de los jugadores que convocó el entrenador Óscar Villegas es determinante para una buena respuesta.
El preparador físico Mauricio Gonzales afirma que en El Alto habrá un rendimiento óptimo, pero habrá que cuidarse de visitante porque los futbolistas de las otras selecciones están mejor preparados.
—Mauricio, ¿cómo analiza la parte física de los jugadores de la Selección?
—La parte física de los jugadores de la Selección es totalmente heterogénea, no es una condición física como la que se tiene en los equipos, de un grupo que trabaja permanente y constantemente bajo una misma metodología, porque cada club, cada cuerpo técnico, cada preparador físico tiene una metodología de trabajo, y la continuidad en el proceso de entrenamiento, en el día a día, hace que se vayan consolidando ciertas estructuras que el cuerpo técnico considera como prioritarias de acuerdo a la idea de juego del entrenador.
Entonces, cuando el futbolista va a la Selección nacional los preparadores físicos se encuentran con jugadores que tienen una condición física muy distinta y esa es la principal dificultad.
Pero también hay una fortaleza, el seleccionador nacional tiene la posibilidad de elegir a los futbolistas que él considera que en ese momento se adecuan y están mejor adaptados o adecuados al estilo de juego que él quiere imponer, además de sus expectativas.
Lo que siempre hemos manejado como cuerpo técnico es que en la Selección no se puede hacer una preparación física porque no hay un tiempo para desarrollar las capacidades condicionales, lo que se tiene que hacer es eminentemente un trabajo de funcionamiento, táctico, estratégico y la parte física tiene que ser una parte complementaria, que se trabaje en reforzar algunos aspectos que los futbolistas seleccionados necesitan en función a la idea de juego, la forma de juego que quiere plantear el seleccionador nacional.
—¿Los jugadores de la Selección están en condiciones para responder a las exigencias del momento?
—Para responderte tendría que conocer bien cuál es el estilo de juego del seleccionador. En lo personal, trabajo con un entrenador muchos años y sé cuál es su idea y estilo de juego, y mi principal función, en algo que la mayoría de los preparadores físicos, a veces, nos confundimos y no entendemos, es adecuar fisiológicamente esos futbolistas para que puedan jugar de la forma que quiere el entrenador. De nada sirve que como preparador físico hago que el futbolista sea veloz, rápido, resistente, si no termina jugando de la forma como el entrenador plantea en los equipos o no desarrolla la idea de juego que tiene. Muchas veces lo preparadores físicos pensamos que somos más importantes que el entrenador, hasta que e los futbolistas y priorizamos mucho trabajo de fuerza, de resistencia, cuando lo que hay que hacer es que el futbolista esté adecuado fisiológicamente al estilo de juego que tiene el entrenador, en este caso el seleccionador.
Yo no tuve la oportunidad de trabajar con Óscar Villegas; entonces no conozco al detalle cuál es su estilo de juego y los jugadores que convocó para los partidos son los que se adecuan a la forma y el estilo de juego que él quiere imponer.
—¿Cómo están los seleccionados nacionales en relación a los jugadores de las otras selecciones?
—Indudablemente, si comparamos a escala sudamericana, el nivel de condición física del futbolista boliviano es bajo en relación al resto de los otros países. Muchas veces nos preguntamos: ¿cuál es el motivo? Recuerdo que al asistir a un curso en Sao Paulo hace varios años (aproximadamente 10 años), un futbolista Sub-20 del Sao Paulo hacía una sentadilla con 110 kilos, y en ese entonces en el fútbol profesional muy rara vez un futbolista podía levantar 80 kilos en sentadilla. Ahora, esas diferencias se han reducido, pero la diferencia se mantiene en lo que es el desarrollo de la fuerza, de potencia, incluso en el desarrollo de las capacidades metabólicas de lo que es el trabajo de la resistencia, la resistencia a los sprints es menor en el fútbol nacional.
Yendo un poco más al fondo, el tema es que en nuestro país y es algo que habría que investigar, sondear o es algo que quizás todos sabemos, pero nadie se anima a decirlo. Lo que pasa es que hay muchos cambios de entrenadores, de cuerpo técnico. Un ejemplo, como preparador físico voy a un equipo en enero y comienzo a implementar una metodología de trabajo, estoy dos, tres, cuatro meses con el equipo y está comenzando a agarrar la metodología y a desarrollar las capacidades condicionales y de pronto tenemos que irnos, viene otro cuerpo técnico con otra metodología totalmente diferente y el futbolista está constantemente cambiando la forma de trabajo. Eso pasa en Bolivia porque no tenemos una línea de una escuela de preparación física.
En Argentina, todos los preparadores físicos tienen una línea, una estructura de trabajo, todos laboran básicamente sobre lo mismo, hay alguno que le mete una cosita más o una cosita menos, pero cuando se cambia un cuerpo técnico, el que viene prepara sobre la misma estructura de trabajo, lo que varía sustancialmente es la parte táctica, la idea de juego, el estilo de juego, eso no pasa en Bolivia. Entonces, el futbolista boliviano no puede consolidar un desarrollo de sus capacidades condicionales a lo largo del tiempo porque constantemente está cambiando la metodología de trabajo.
Algo que como cuerpo técnico nosotros quisimos hacer en 2015 con las selecciones bolivianas, y por eso hacíamos charlas, seminarios, congresos y teníamos reuniones constantes con los preparadores físicos de los clubes, era de alguna manera respetar la metodología de trabajo de los preparadores físicos del país y de los extranjeros que venían, pero también marcar como base algunos parámetros condicionales desde el punto de vista neuromuscular y metabólico que el futbolista tenía que cumplir para ser convocado la Selección nacional.
Por otro lado, tenemos que hablar de la carencia formativa. El desarrollo de capacidades condicionales de nuestros adolescentes está totalmente muy mal direccionado, porque los preparadores físicos en periodo formativo, en escuelas de fútbol, en divisiones menores, se confunden demasiado y comienzan a copiar sistemas, a ser preparadores físicos por YouTube, a seguir modas y eso está mal. Para la condición física hay determinadas etapas o fases sensibles en las que se tiene que desarrollar la capacidad neuromuscular, metabólica, de hipertrofia-desarrollo y esas fases no se pueden saltar. Hoy, hay entrenadores o preparadores físicos preocupados en desarrollar la fuerza en niños de 8, 9, 10 años, cuando no tienen la base hormonal a nivel fisiológico como para desarrollar patrones de fuerza, pero sí se quiere hacer un desarrollo de la fuerza desde el punto de vista coordinativo a nivel intermuscular, eso es otra cosa y para eso no se necesita ningún tipo de sobrecarga.
La preparación física sistematizada y organizada se puede desarrollar a partir de los 15 años, por tanto, hay mucha confusión en ese tema, por eso nuestros deportistas no logran un desarrollo condicional, un desarrollo físico que a los 16, 17, 18 años les permita hacer una sentadilla con 110 kilos, un pres pectoral con 120 kilos o tener niveles de potencia que les permita disputar un partido en Primera División.
Es un aspecto muy complejo el fútbol nacional y aprovecho la oportunidad, porque desde hace un año estoy insistiendo, hablando y llamándolo a Christian Quiroga, que es el director de desarrollo de la Federación para implementar el reglamento del proyecto de homologación y validación de lo que son las licencias de preparación física.
En nuestro país, lastimosamente, no hubo una reglamentación para la otorgación de las licencias a entrenadores, se armó un problema porque se comenzó a dar licencias a troche y moche, a alguien que no tenía los méritos tuvo una licencia A, una licencia PRO, y le dije que no permitamos que eso pase con los preparadores físicos, pero no hay respuesta.
—¿Cómo le irá a la Selección contra Colombia y Argentina en lo físico?
—Viendo la nómina de convocados, la mayoría son futbolistas de Always Ready, Bolívar y The Strongest, que están adaptados fisiológicamente al medio y la respuesta va a ser óptima por más que se pretenda tener más tiempo de trabajo, se pide más días de preparación no para mejorar la preparación física sino para hacer trabajos tácticos específicos y consolidar la idea de juego que tiene el seleccionador.
Hay que tener cuidado con Argentina, que tiene otro ritmo, otra intensidad y quizá ahí vaya a tener algún problema por la diferencia en la potencia, la fuerza y la velocidad, que son cualidades que las tiene bien desarrolladas y marcadas, pero eso se contrarresta con el posicionamiento, funcionamiento y la parte táctica que el seleccionador pueda plantear.
La Paz/AEP