Está claro que a la Selección se llega por méritos y capacidades, sin privilegiar los intereses económicos, que es un derecho a exigir, pero cuando hay resultados positivos.
Un hecho que llamó profundamente la atención es que no todos los jugadores sienten lo que es lucir y defender la camiseta de la Selección nacional.
A la finalización del partido que igualaron con Paraguay 2 a 2, uno de los futbolistas más dolidos por el resultado que dejó reducidas al mínimo las posibilidades de clasificación a la próxima cita mundialista fue Ramiro Vaca, quien se mostró amargado, compungido y muy sacado de la buena onda como parte del grupo.
Por su forma de compartir camarín con sus compañeros después de un encuentro, el martes en la tarde se lo vio desconocido, tenía un semblante visiblemente marcado por la frustración, buscando explicaciones a la mala actuación que cumplió la Verde en un compromiso que fue calificado como “clave y decisivo” para que se mantenga vivo y firme en la pelea por ir al Mundial 2026.
A él se sumaron, aunque en menor dimensión, el capitán Luis Haquin y el arquero Guillermo Viscarra, quienes sentados en la banqueta donde se cambian y preparan no hacían más que mover la cabeza en señal de incomprensión a lo que sucedió dentro el campo de juego.
Otro grupo minoritario sintió los efectos del resultado al tomarlo como una derrota por la forma cómo se jugó y se cedieron dos valiosos puntos; en cambio, para la mayoría, entre ellos los que juegan afuera y los jóvenes, era algo común y normal, como ocurre cuando pierden, empatan o ganan sus equipos en torneos locales, sin medir el sentimiento que significa jugar en la selección de un país, que representan a millones de hinchas, es privilegio de pocos para ansiedad de muchos.
¿POR DINERO?
Sin tener la certeza de qué pasó con el rendimiento de la Selección, que distó mucho con relación a lo que expuso en los partidos frente a Venezuela (4-0) y Colombia (1-0), comenzó a conjeturarse sobre el bajón que habría sido provocado por el incumplimiento de la dirigencia de la Federación Boliviana de Fútbol al compromiso económico que les habría planteado de pagar el doble del premio por objetivo que ha sido acordado si le ganaban a Colombia.
Cosa que no ocurrió al momento de la cobranza, lo que habría repercutido en la parte anímica de los seleccionados y, por ende, en el rendimiento dentro el campo de juego.
Está claro que a la Selección se llega por méritos y capacidades, sin privilegiar los intereses económicos, que es un derecho a exigir, pero cuando hay resultados positivos.
La FBF entrega material tecnológico a clubes y asociaciones
La Federación Boliviana de Fútbol, dentro el plan de mejorar el fútbol boliviano, entregó ayer a los 16 clubes que conforman la División Profesional y las nueve Asociaciones de la División Aficionados equipos GPS y equipos tecnológicos que permitirán la medición del rendimiento de los atletas.
Guillermo Viscarra y Luis Haquin son los que más sufren con el empate en casa de la Verde.
La empresa Catapult será la proveedora de los equipos. “Hemos visto que el fútbol cada vez es más físico y esta tecnología les servirá a los cuerpos técnicos para que puedan medir y hacer un seguimiento a sus jugadores. También es para que no existan tantas diferencias entre los clubes grandes y los denominados chicos”, dijo el presidente de la FBF, Fernando Costa.
Comentó que la información que puedan ofrecer los equipos GPS será de vital importancia para una excelente toma de decisiones de los cuerpos técnicos, también en las selecciones en cuanto a convocatorias.
La inversión para la adquisición del material será de 280.000 por año y la firma de contrato con la empresa Catapult se extenderá por los próximos tres años.
Asimismo, la entidad proveedora asesorará en la capacitación de quienes requieran para su funcionamiento.
Cada club y Asociación recibió una maleta que contiene dos antenas con trípodes, chalecos de diferentes tallas y 24 dispositivos que servirán para hacer las mediciones de rendimiento.
SIGUE EL SUEÑO
Por otro lado, el titular federativo hizo referencia al resultado que la Selección logró ante Paraguay (2-2) y afirmó que la ilusión por ir al próximo Mundial sigue latente.
“Pese al empate seguimos con la fe intacta, jamás nos rendiremos en busca del objetivo. Estamos en zona de clasificación, esto nos debe incentivar y motivar a mentalizarnos que en marzo tenemos que traer puntos de visitante y consolidar y hacer respetar la casa con los tres puntos de local”, subrayó.
Anunció que el objetivo en la próxima fecha doble de las Eliminatorias Sudamericanas al Mundial 2026, que será en marzo del próximo año, es sumar los seis puntos, en partidos que se jugarán contra Perú en Lima y frente a Uruguay, en el estadio Municipal de El Alto.
“Para mí y los que estamos involucrados en la Selección absoluta es un incentivo. Hay que ponerse el objetivo de traer tres puntos de Lima y sumar tres puntos en casa”, remarcó el dirigente que confía en un buen rendimiento de la Verde en los venideros compromisos.
La Paz/AEP