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Soldados de Estados Unidos en formación para iniciar sus ejercicios. (Foto: RRSS)

EEUU perfila una guerra de cuarta generación y alista ejercicios bélicos

El Gobierno del Perú autorizó el ingreso a su territorio de un millar de militares estadounidenses armados y prepara prácticas en sus fronteras.

La Paz, 02 de junio de 2023 (AEP).- El Congreso peruano aceptó el pasado miércoles que más de 1.000 militares de Estados Unidos ingresen a su territorio con armamento, aeronaves y transporte terrestre y náutico para realizar entrenamientos tácticos.

Al respecto, el analista Pedro Ugarte indicó que ese país trata de desarrollar una guerra de cuarta generación en Sudamérica para amedrentar a Bolivia y Argentina, naciones progresistas que buscan industrializar el litio con otros países, dejando de lado a EEUU.

“La comandante del Comando Sur (Laura Richardson) ve con preocupación que Bolivia o la región esté pensando desarrollar la industrialización del litio (con otros países); ellos están sobre eso, lo han indicado muy claro, y no deberíamos desvirtuar ninguna hipótesis de conflicto en lo que corresponde al expansionismo de EEUU con relación a la extracción de litio de Bolivia”, dijo Ugarte al respecto.

La comandante del Comando Sur de Estados Unidos llegó a Chile por segunda vez el 18 de abril para reunirse con los líderes de las Fuerzas Armadas del vecino país, a fin de tratar temas de defensa y seguridad.

“Chile es un socio confiable y un contribuyente respetado para la seguridad regional”, informó el Comando Sur de Estados Unidos a través de su cuenta de Twitter.

“No es coincidencia que pocas semanas atrás se reúna la comandante del Comando Sur (con Chile) y ahora el gobierno transitorio esté autorizando el ingreso del contingente militar estadounidense”, dijo Ugarte.

El analista indicó que toda la región debe prestar atención a lo que está pasando, ya que no solamente puede ser un simple ejercicio militar como lo están haciendo ver. “Van a realizar ejercicios del 1 de junio al 31 de diciembre, pero vaticino que esto se ampliará aún más”.

Con todo ello, ratificó que están tratando de utilizar la guerra de cuarta generación para dividir a los países de Latinoamérica.

“Utilizan la economía, la política, el golpe blando para poder irrumpir en los gobiernos democráticos y constitucionales de las regiones, para hacer prevalecer su idea, la política Monroe que viene desde los años 70”, resaltó Ugarte.

La llamada guerra de cuarta generación es una denominación dentro de la doctrina militar estadounidense que comprende a la guerra de guerrillas, la guerra asimétrica, la guerra de baja intensidad, la guerra sucia, el terrorismo de Estado u operaciones similares y encubiertas, la guerra popular, la guerra civil, el terrorismo y el contraterrorismo, además de la propaganda, en combinación con estrategias no convencionales de combate que incluyen la cibernética, la población civil y la política.

En este tipo de guerras no hay enfrentamiento entre ejércitos regulares ni necesariamente entre Estados, sino entre un Estado y grupos violentos o mayormente entre grupos violentos de naturaleza política, económica, religiosa o étnica.

“Se tiene que poner mucha atención en la presencia de Estados Unidos como una forma de presión militar en las decisiones estrictamente internas de cada Gobierno”, alertó.

Aseguró que la industrialización del litio no solamente traerá beneficios para Bolivia, sino también para los países vecinos y en general para toda la región. “Es decir, para todos los gobiernos progresistas, de izquierda, que están tratando de buscar igualdad en lo que corresponde a la industrialización de los recursos naturales, no solamente con el mercado americano sino con los mercados del mundo”.

Ugarte sostuvo que los políticos de Bolivia y las Fuerzas Armadas, a través del Consejo Supremo de Defensa del Estado Plurinacional (Cosdep), deben pronunciarse respecto a este movimiento en la región.

“Las autoridades bolivianas deben tomar y generar políticas internas para precautelar los recursos naturales con mayor recelo, ya que estos benefician al pueblo boliviano”, dijo el analista.

Los entrenamientos de los militares estadounidenses se efectuarán en Lima, Callao, Loreto, San Martín, Santa Lucía, Huánuco, Ucayali, Pasco, Junín, Huancavelica, Cusco, Ayacucho, Iquitos, Pucusana y Apurímac.

El excanciller peruano Héctor Bejar condenó el hecho y señaló que no es casual que vaya a ocurrir desde junio. Recordó que en Perú hay “un Gobierno espúreo, resultado de un golpe de Estado y autor de 70 muertes”, ocurridas durante las protestas contra la mandataria designada Dina Boluarte.

Consideró que la presencia de los militares “es un disuasivo, parte de una política de atemorizamiento del pueblo peruano, que anunció nuevas protestas para julio”.


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