La derecha radical opositora pactó en Estados Unidos, al amparo de la Casa Blanca, un bloque de “unidad” contra la administración socialista y el MAS.
La Paz, 17 de mayo de 2024 (AEP). – La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, aseguró ayer que el gobierno del presidente Luis Arce no se someterá a los intereses de la derecha que pactó un acuerdo en Estados Unidos ni a los intentos de boicot internos y externos que buscan desestabilizar la gestión socialista.
La autoridad de la Presidencia respondió así ante la consulta periodística sobre el “pacto secreto” firmado por la oposición en Washington, capital de Estados Unidos, al amparo de la Casa Blanca y del Departamento de Estado, para supuestamente enfrentar al Movimiento Al Socialismo (MAS) en las elecciones presidenciales de 2025.
Alcón recordó que la derecha opositora y Estados Unidos tienen intereses comunes y que el gobierno de Arce siempre ha visto la injerencia de ese país en asuntos internos.
En ese marco advirtió: “El Gobierno no será títere de la derecha ni de los intereses y del boicot interno y externo que existe hacia la gestión del presidente Arce”.
GESTIÓN
Para la Viceministra de Comunicación está clara la ofensiva política: “Están buscando la convulsión, y nuestra respuesta será continuar con la gestión”.
De acuerdo con Alcón, la principal preocupación del presidente Arce es seguir trabajando y entregar obras, como ayer lo hizo en el departamento de Chuquisaca, que beneficien a la población.
El propio Jefe de Estado señaló ayer en Monteagudo que a pesar de las presiones y desafíos, el Gobierno se mantiene firme en su compromiso de avanzar y satisfacer las necesidades del pueblo boliviano.
“Estamos muy conscientes del rol que nos toca jugar ahora: satisfacer tanta necesidad reprimida que ha tenido el pueblo boliviano durante tantos años”.
DECRETO
El Órgano Ejecutivo abrogó el Decreto Supremo 5143 de modernización de Derechos Reales para evitar que su “politización” impulsada por parte de la derecha extrema y del bloque de Evo Morales derive en una convulsión social y la ruptura del orden constitucional del país.