Al respecto, el analista económico, Martín Moreira, señaló que Morales actúa de forma contradictoria y, además, que su propuesta es “un error económico”.
Evo Morales pasó de criticar el acceso a deuda externa e incluso de ordenar un bloqueo en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) a créditos por más de $us 1.000 millones, a admitir que el país necesita liquidez y que para gobernar necesita de ello, tras reunirse en “reserva” con organismos internacionales para hacer gestiones con el fin de contraer una deuda externa de $us 1.000 millones.
Fue en su programa dominical. Morales, en medio de una conversación sobre la situación económica, agravada por el “bloqueo de la impunidad”, que él alienta, reveló que lo “buscaron algunos organismos internacionales” y que ha tenido “una reunión reservada” con ellos para hablar del acceso a un crédito, en caso de ser electo en 2025, a pesar de que la Constitución Política del Estado (CPE) se lo impide.
“Nos hemos reunido, yo decía, como hermano mayor del campo, no quisiera que mis hermanos todavía sigan sin agua potable, sin luz. Necesito para arrancar, si gano las elecciones, 1.000 millones de dólares. Y los expertos me dicen ‘Evo, cuando se trata de cambiar la matriz energética y el tema agua, sin problemas conseguimos 1.000 millones de dólares’”, reveló en su programa difundido por radio Kawsachun Coca.
De hecho, en abril de este año, Morales lamentó que el país dependa de la “deuda externa”, incluso, un mes después, en un ampliado en Cochabamba, sus adeptos instruyeron a los diputados, a titulares y suplentes “no ser cómplices del endeudamiento”.
A pesar de que luego Morales pidió “respetuosamente” a la Asamblea Legislativa y particularmente a la Cámara de Senadores que aprueben los créditos internacionales pendientes para coadyuvar con el ingreso de divisas al país, sus legisladores no visibilizaron los créditos que suman más de $us 1.076 millones, varios de los cuales están paralizados desde el año pasado.
Por ejemplo, la Cámara de Senadores rechazó un crédito de $us 62 millones para ampliar la línea café de Mi Teleférico, en la ciudad de La Paz, y lo devolvió a la Cámara de Diputados, lo que -según norma- posterga su consideración hasta la próxima legislatura.
Mientras que, en la Cámara de Diputados, se rechazó la aprobación de un crédito por $us 40 millones otorgado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para la conclusión del saneamiento de tierras en el país.
Solo en este caso al menos 332.556 propietarios son perjudicados porque no pueden legalizar sus tierras.
Al respecto, el analista económico, Martín Moreira, señaló que Morales actúa de forma contradictoria entre lo que dice y lo que hace; y, además, que su propuesta es “un error económico”, porque no es el monto que se necesita para cubrir la demanda de liquidez del mercado nacional, ya que ese dinero no alcanzaría ni para cubrir el 100% de la subvención a los hidrocarburos, por lo que exigió que se dé a conocer qué organismos se comprometieron a desembolsar ese dinero y bajo qué condiciones.
“Mil millones de dólares realmente no le alcanza para nada. Porque lo que ha pasado con el tema de subvención, estamos hablando de más de dos mil millones de dólares, estamos pagando 70 millones de dólares semanal. Entonces, si él propone volver con la liquidez o la liquidez de dólares al sistema financiero, van a tener que prestarse no mil millones de dólares, sino por lo menos unos tres mil millones de dólares”, dijo.
Además, Moreira señaló que si Morales está planteando que le den un dinero por la campaña o por ganar las elecciones, se tiene que ver cuál es el compromiso con ese país o con esa entidad que le está ofreciendo los $us 1.000 millones.
“Sí necesitaríamos prestarnos el dinero, pero no de fondos monetarios ni vender nuestro país por mil millones de dólares. Si alguien le da mil millones de dólares de esa manera tan abierta, tiene que ser o un Fondo Monetario Internacional o un fondo internacional buitre. Porque así no más, no te van a dar la plata, tiene que haber un compromiso”, dijo al exigir al expresidente que diga con qué organismos conversó.
La Paz/ABI