Hace 42 años, los bolivianos cerraron un ciclo oscuro de su historia, marcada por luchas sangrientas contra los regímenes dictatoriales entre 1964 y 1982.
Bolivia conmemoró 42 años del retorno de la democracia, luego de un ciclo sangriento de regímenes dictatoriales. El presidente Luis Arce ponderó la lucha incansable del pueblo por su libertad y dijo que existe el reto de defenderla “contra todo interés golpista”.
Desde 1982, cada 10 de octubre, los bolivianos rememoran el valor de miles de mineros, campesinos obreros, fabriles, activistas de derechos humanos, hombres y mujeres, entre otros, que dieron su vida para que hoy en el país se pueda vivir y expresarse en total libertad, sin la opresión de la bota militar que empañe el derecho a una convivencia democrática.
El presidente Luis Arce recordó la fecha como “el cierre de un periodo nefasto de cruentas dictaduras militares que dejaron dolor y luto en las familias bolivianas”. Dijo que ahora el reto es defender la democracia “contra todo interés golpista”.
“Conmemoramos 42 años de la recuperación de la democracia con el gran reto de defenderla contra todo interés golpista, esa lucha incansable del pueblo boliviano por la libertad, la dignidad y soberanía popular. ¡Los golpistas no pasarán!”, escribió el mandatario en un post.
Por la fecha, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) organizó ayer el conversatorio De la Dictadura a la Construcción de la Democracia: a 42 Años del Sistema Democrático en Bolivia, en La Paz. El evento contó con la asistencia de universitarios de diferentes casas de estudios superiores, a quienes se encomendó seguir en la senda de la democracia y defenderla, porque son los nuevos actores de la sociedad que cambiarán el destino del país.
Ciclo de dictaduras
Bolivia vivió un ciclo de dictaduras que duró de 1964 a 1982. Un informe de la Comisión de la Verdad sobre las dictaduras de ese periodo da cuenta de que durante el gobierno de facto de Barrientos se aplicó la Doctrina de Seguridad Nacional y se identificó como principal enemigo interno a los trabajadores mineros, por lo que fueron víctimas de una serie de violaciones a sus derechos humanos.
Las víctimas de la Masacre de San Juan, episodio negro de la dictadura.
La Paz/AEP