El Pacto de Unidad considera esencial que la discusión política se centre en la inclusión de estos sectores que históricamente han sido excluidos del poder y la toma de decisiones.
El Pacto de Unidad, la mayor alianza social y política del país, enfocará su lucha política-electoral en la inclusión de sectores históricamente marginados en Bolivia, con espacios de debate político para la toma de decisiones, anunció Milán Berna, miembro de la Comisión Política de la organización.
“Hoy estamos apostando a una lucha política electoral. Entonces, ¿en qué influye eso y qué significa? Incluir a aquellos sectores marginados históricamente”, dijo en entrevista con Bolivia TV.
A pocos días de iniciarse un nuevo año, que estará marcado por las elecciones generales, Berna destacó la necesidad de abrir espacios de debate político en las nueve federaciones departamentales del MAS-IPSP del país, para que las clases indígenas, originarias y populares puedan definir sus demandas, evitando ser relegadas como ocurrió en el pasado.
“La lucha social del movimiento indígena originario campesino ha sido fundamental para el cambio estructural en Bolivia, después de la invasión colonial y la opresión sufrida por décadas”, afirmó Berna.
En este sentido, el Pacto de Unidad considera esencial que la discusión política se centre en la inclusión de estos sectores que históricamente han sido excluidos del poder y la toma de decisiones.
Estructura orgánica
También mencionó que el objetivo es avanzar hacia una estructura más orgánica del movimiento, revisando y modificando los estatutos internos del MAS-IPSP, para reflejar las luchas y demandas del pueblo indígena y de la clase popular.
Enfatizó en que, a diferencia de los partidos tradicionales, donde las decisiones suelen ser tomadas por un pequeño grupo de élite, el Pacto de Unidad busca, a través del MAS, ser un instrumento político que verdaderamente represente al pueblo y que permita debatir políticas públicas desde las bases, en áreas como salud, educación y economía.
La Paz/AEP