Los gobiernos municipales a los que llegó la asistencia estatal son Moro Moro, Quirusillas y Postrervalle, informó el presidente Luis Arce Catacora.
El Gobierno entregó 33,9 toneladas de ayuda humanitaria a las familias afectadas por la crisis climática a tres municipios rurales del departamento de Santa Cruz.
El presidente Luis Arce informó en sus redes sociales que la inversión de la ayuda asciende a Bs 495.426 y que esta consiste en alimentos, insumos de rehabilitación y más de 500 horas máquina en favor de 2.217 familias damnificadas por inundaciones, deslizamientos, granizadas, heladas y sequías.
Los municipios a los que llegó la asistencia estatal son Moro Moro, Quirusillas y Postrervalle.
“A pesar de los obstáculos de quienes no les gusta que lleguemos donde se encuentra la población más necesitada, seguimos trabajando y atendiendo de manera integral a las familias afectadas por la crisis climática”, indicó el mandatario en la plataforma X.
“No están solos”, aseguró Arce a las regiones azotadas por el cambio climático.
Las intensas lluvias, inundaciones, deslizamientos, granizadas, heladas y sequías han azotado Bolivia desde finales de 2023 y han dejado un saldo devastador: miles de familias damnificadas en diferentes regiones del país.
Las regiones más golpeadas han sido Santa Cruz, Cochabamba, La Paz, Potosí, Chuquisaca y Tarija. En estas zonas, las inundaciones han provocado el desborde de ríos, la destrucción de cultivos y la pérdida de ganado, afectando gravemente la economía local.
Los deslizamientos, por su parte, han ocasionado daños en infraestructuras, viviendas y vías de comunicación, aislando a comunidades enteras y dificultando el acceso a servicios básicos como la salud y la educación.
Las granizadas y heladas han impactado principalmente en zonas agrícolas, causando cuantiosas pérdidas en las cosechas y afectando la seguridad alimentaria de las familias afectadas.
En cuanto a las sequías, estas han golpeado con mayor severidad a las regiones del chaco boliviano, donde la falta de agua ha provocado la muerte de ganado, la desertificación de tierras y el éxodo de comunidades hacia zonas con mayor disponibilidad de agua.
La Paz/AEP
