Al menos 12 personas fueron heridas con impactos de balín, e incluso balas, como parte de la violencia ejercida por los militares.
Pasadas las 14h30 del miércoles, junto con un grupo de militares encapuchados y tanques, Zúñiga tomó la plaza Murillo donde funcionan los órganos Ejecutivo y Legislativo. Y con el apoyo de una tanqueta, forzó la puerta del Palacio de Gobierno.