En puertas de instituciones de la Iglesia Católica, en La Paz y Santa Cruz, la población se dio cita con carteles de repudio a los abusos sexuales cometidos por curas.
La Paz, 18 de mayo de 2023 (AEP- Digital).- Activistas autoconvocados iniciaron una protesta en puertas de las instalaciones de la Iglesia Católica de la ciudad de La Paz y de Santa Cruz de la Sierra, con carteles y clamores de justicia rechazaron los abusos sexuales y violaciones contra niños, niñas y adolescentes en el país.
Desde que se conoció el caso del cura Alfonso Pedrajas, quien en su diario confesó que cometió al menos 85 abusos sexuales a menores, comenzaron a develarse delitos similares perpetrados por otros sacerdotes y a masificarse los pedidos de cárcel para los cómplices y autores de estos delitos.
El representante del Comité Impulsor de Justicia (CIJ), Aldo Michel, lamentó los crímenes que involucran a curas la orden jesuita, y en esa línea pidió que los predios que fueron entregados a esa instancia sean revertidos al Estado.
“Lo que más nos duele y le duele a la sociedad boliviana es que nuevamente niños y jóvenes sean el objetivo de estas acciones reveladas, cometidas lamentablemente por religiosos que han olvidado absolutamente su rol encomendado por las religiones que predican, y han convertido, además, sus acciones en acciones impunes y políticas”, dijo a la prensa durante una significativa marcha de protesta de la población en la urbe paceña.
Además, pidió a la Asamblea Legislativa, al Ministerio de Justicia y al Ministerio de Educación que se recuperen espacios y se corten las competencias de la Iglesia Católica en el país, ya que por muchos años estos terrenos, que fueron concedidos por el Estado a la orden, los beneficiaron sin ningún tipo de impuesto.
“Le estamos pidiendo al Estado que recupere estos predios, que recupere estas competencias fundamentalmente en el ámbito educativo, que no han sido usados para el fin social y que lamentablemente en muchos casos se han convertido en escenario de actos lesivos contra la moral, la dignidad de menores, con acciones delictivas”, dijo Michel quien, junto a un colectivo, se dirigió a las puestas de la Fiscalía de La Paz para exigir justicia para las víctimas.
En otro punto de la ciudad, en puertas del seminario San Jerónimo, otro grupo compuesto en especial por mujeres expresaron su indignación por los crímenes que con el pasar de los días involucran a más curas de la Compañía de Jesús.
“¡Ni confesión ni perdón, curas al paredón!”, fueron las frases que vociferaron en afueras de la instalación religiosa.
El estudiante Alfredo Calvimontes lamentó que más de un centenar de niños, niñas y adolescentes hayan sido víctimas de violaciones y abusos sexuales de parte de los curas.
“Estamos cansados e indignados al enterarnos de estos casos de pederastia. Señores ¿hasta cuándo vamos a estar con los ojos vendados?”, cuestionó y pidió a la población que se sume a estas protestas en rechazo de estos hechos.
En la ciudad de Santa Cruz, en puertas del Arzobispado, autoconvocados protestaron por los crimines, con mensajes de repudio a los actos de pederastia, exigieron cárcel para los autores y encubridores.
También madres de familia se dieron cita en los lugares de concentración con carteles que decían: “No es falta de amor, es un cura violador”, “Ni confesión, ni perdón, curas al paredón”, “Señoras y señores hay curas violadores y encubridores”, entre otras frases.
