El Gobierno exige respeto al uso tradicional, nutricional, terapéutico, ritual, industrial y comercial de la hoja en su estado natural.
La Paz, 10 de junio de 2023 (AEP).- Crece el apoyo a Bolivia para desclasificar la coca de la Lista 1 de estupefacientes. Países Bajos, Argentina, Colombia y México expresaron su respaldo. Ayer, el vicepresidente David Choquehuanca, en Viena, Austria, mostró avanaces en el tema.
“Representantes mundiales expresaron su apoyo a la iniciativa y mencionaron que harán un seguimiento minucioso al trabajo que se desarrolle”, señala un reporte de la Vicepresidencia.
Choquehuanca se reunió ayer en oficinas de las Naciones Unidas con importantes representantes de varias partes del mundo.
El Vicepresidente explicó los derechos de los pueblos indígenas y el derecho internacional para liberar la hoja de coca de la lista de estupefacientes de la Convención de 1961.
Mencionó, de acuerdo con el informe institucional, que ya se tomó contacto con el Comité Técnico de Farmacodependencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que será la responsable y encargada de hacer el examen.
“Todos ellos conformarán un comité que va a estar encargado de una revisión crítica a corto plazo”, dijo.
Informó que se solicitó al Comité de Farmacodependencia la incorporación de expertos relacionados con la medicina natural y medicina tradicional de la OMS, así como expertos en derechos de los pueblos indígenas.
“En el encuentro hubo intervenciones importantes como la de Colombia, que ha expresado su apoyo total a la demanda boliviana. México y Argentina también han mencionado que van a acompañar el proceso estrechamente, así como el interés de los demás países que ven con mucha atención este proceso que busca reparar un error histórico y desclasificar a la hoja de coca de la Lista 1 de estupefacientes”, explicó el secretario general de la Vicepresidencia, Juan Carlos Alurralde.
Respaldo
El 10 de mayo en La Paz, la embajadora de los Países Bajos para Bolivia, Nathalie Lintvelt, anunció que su país retirará su objeción a la reserva que hizo Bolivia en su readhesión a la Convención de Estupefacientes de 1961, que preserva el derecho de Bolivia a permitir en su territorio la masticación tradicional de la hoja de coca, su consumo y uso en su estado natural para fines culturales y medicinales.
La diplomática se reunió en la sede de gobierno con el vicepresidente Choquehuanca, a quien comunicó la decisión de su país.
En marzo, durante una visita a Viena, Austria, en su intervención en el plenario del 66 periodo de sesiones de la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas, Choquehuanca exigió respetar el legítimo derecho de los pueblos para un uso “tradicional, nutricional, terapéutico, ritual, industrialización y comercialización de la hoja de coca en su estado natural”.
Arce reivindica los beneficios
El Ejecutivo de Luis Arce reivindicó los usos benéficos de la hoja de coca y advirtió de que las actuales restricciones impuestas por la convención “obstaculizan el potencial mercado internacional de productos de coca”, que podrían beneficiar a la comunidad internacional.
El pacto de 1961 condena a esta materia prima como estupefaciente, prohíbe su consumo y la masticación; sin embargo, el artículo 49 de ese documento establece que “toda parte (país miembro de esa Convención) podrá reservarse el derecho de autorizar temporalmente en cualquiera de sus territorios” varias disposiciones, entre ellas, la “masticación de la hoja de coca”.
En Bolivia está vigente la Ley 864 del 13 de diciembre de 2016, que declaró “Patrimonio Cultural Inmaterial del Estado Plurinacional de Bolivia al Acullico como la masticación tradicional de la hoja de coca, que permite extraer el contenido de sus nutrientes”.
