Así lo expresaron ciudadanos de a pie que recuerdan aún los momentos de incertidumbre vividos durante las primeras olas de la pandemia.
Con la administración de vacunas para inmunizar a la población boliviana contra el coronavirus, muchas personas pudieron tener la seguridad para retomar sus actividades laborales, económicas y académicas, trastocadas por la cuarentena rígida dictada por el anterior gobierno.
Así lo expresaron ciudadanos de a pie que recuerdan aún los momentos de incertidumbre vividos durante las primeras olas de la pandemia, donde las muertes de personas infectadas eran moneda común, debido a la ausencia de acciones concretas para evitar que el virus siga causando bajas.
Zulema Coarite, profesora de primaria, destacó que gracias a esas medidas de impacto pudo retomar sus actividades laborales, pues trabajar vía internet tenía muchas desventajas y aún ahora sigue enfrentando las secuelas de los meses cuando la educación se impartió en línea e incluso se suspendió el año escolar.
Así también lo recuerda Juan Condorí, un comerciante que no podía salir a ganarse el pan de cada día debido a la cuarentena, lo que generó que se reduzca su economía familiar. Sin embargo, gracias a la vacunación logró retomar sus actividades y volver a llevar el pan del día a su hogar.
A cinco días de asumir el mando del país, el presidente Luis Arce puso en marcha su estrategia contra la pandemia, entregando el Bono Contra el Hambre a familias como la de Juan. Asimismo, comenzó con las gestiones para la llegada de vacunas contra el virus, así como la adquisición de pruebas de diagnóstico rápido y PCR para la población boliviana.
AEP