Se trata de la segunda jornada de manifestación en la que denuncian irregularidades en los procesos de contratación, acoso laboral y violaciones a sus derechos por parte de la alcaldía paceña.
La Paz, 16 de abril de 2024 (AEP-Digital).- El centro de La Paz vuelve a colapsarse con los trabajadores de ocho instancias municipales, afiliados a organizaciones sindicales, quienes llevan a cabo protestas y bloqueos en varias calles. Acusan al alcalde Iván Arias de irregularidades en contrataciones, violaciones a sus derechos laborales, acoso laboral y actitudes prepotentes.
“Cansados de tanta prepotencia que tiene el alcalde (Iván Arias) con los trabajadores municipales diferenciando trabajadores de primera, de segunda e inclusive de tercera, que no gozan de una seguridad social ni de largo ni corto plazo, seguimos persistiendo en esta lucha, en este pedido al alcalde en que flexibilice de alguna manera en esa su prepotencia”, dijo Lázaro Aruquipa, dirigente la Central Obrera Departamental La Paz en contacto con Bolivia Tv.
Desde ayer, lunes, las organizaciones sindicales de las instancias municipales protestan en el centro paceño exigiendo un dialogo con Arias para detener el maltrato a sus afiliados. En la oportunidad advirtieron que persistirían con las medidas de presión si no se atienden sus demandas.
Aruquipa destacó el éxito de la primera jornada de movilizaciones, resaltando la masiva participación de los trabajadores. Afirmó que, a pesar de enviar varias notas solicitando mesas de diálogo con Arias, este ha evitado escuchar sus demandas y “ha delegado la responsabilidad a sus subordinados”.
“Nuestro pedido específico es la atención por parte del alcalde, entonces reiteramos por este medio que nos convoque. Lo exhortamos a deponer esas actitudes arbitrarias y convocar a los trabajadores municipales. Estamos pidiendo derecho al trabajo, respeto a la estabilidad laboral y al fuero sindical”, agregó.
Las protestas se iniciaron hace más de cuatro semanas, cuando los sindicatos de los funcionarios de la Guardia Municipal y del PumaKatari hicieron conocer que no se los consideraba como tales, a pesar de estar afiliados a la Central Obrera Boliviana y ser reconocidos por el Ministerio del Trabajo.
