El Jefe de Estado brasileño manifestó que la “riqueza no llegó a las manos de los más necesitados” en el mundo.
El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva afirmó ayer en la Cumbre del G20 que la “globalización neoliberal fracasó” y pidió una urgente reforma de las instituciones de gobernanza internacional.
“El mundo volvió a crecer, pero la riqueza no llegó a las manos de los más necesitados; no es sorpresa que la desigualdad fomente odio, extremismo y violencia, ni que la democracia esté amenazada; la globalización neoliberal fracasó”, dijo.
Lula lamentó que luego de la crisis económica de 2008 se decidiera socorrer al sector privado “en vez de fortalecer al Estado” y priorizar las economías centrales en vez de apoyar a los países en vías de desarrollo.
El mandatario aprovechó su discurso para defender una de las principales propuestas de la presidencia brasileña del G20, la creación de un impuesto global a las grandes fortunas.
Con un mensaje de unidad y compromiso, Lula abrió formalmente la Cumbre del G20 en el Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro. El evento reúne a los jefes de Estado y de Gobierno de las principales economías del mundo, junto a representantes de la Unión Africana y la Unión Europea, para abordar temas como el hambre, la sostenibilidad y la reforma de la gobernanza global.
“Una tasa del 2% sobre el patrimonio de individuos superricos podría generar recursos del orden de 250.000 millones de dólares por año para invertir en la lucha contra los desafíos sociales y ambientales de nuestro tiempo”, afirmó el mandatario.
Sheinbaum
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, propuso destinar el 1% del gasto militar del grupo para poner en marcha un amplio programa de reforestación.
“Significaría liberar unos 24.000 millones de dólares al año (12 veces lo que ya destina México) para apoyar a 6 millones de sembradores de árboles que reforestarían 15 millones de hectáreas, algo así como cuatro veces la superficie de Dinamarca, toda la de Guatemala, Belice y el Salvador juntos, o 30% la de Suecia”, expresó.
La mandataria destacó que dicha decisión ayudaría a la mitigación del calentamiento global, así como a la restauración del tejido social.
En su intervención durante la primera sesión de trabajo de la Cumbre, titulada “Lucha contra el Hambre y la Pobreza”, Sheinbaum mencionó el caso de México, en donde desde la administración pasada se ha implementado el programa Sembrando Vida, que consiste en dar apoyo a productores del campo y fomentar la siembra de árboles frutales y maderables.
Agencias/AEP
