La fiscal Pam Bondi, declaró ante el Senado que su país no se dejará intimidar por ninguna nación que atente contra su seguridad, citando a México como una amenaza al mismo nivel que Teherán, Moscú y Beijing.
Nuestra región no puede soportar el peso de una guerra cuyas repercusiones se extenderán al mundo entero, y es justo dar a la diplomacia la oportunidad de desengancharse, opinó.