La carrera arrancará el viernes 3 de enero con el prólogo que se desarrollará en la localidad de Bisha, sobre una extensión de 29 kilómetros.
El piloto boliviano Daniel Nosiglia, de la categoría de motos, viajó ayer rumbo a Arabia Saudita con la ilusión de hacer una buena campaña en el Rally Dakar, la competencia más dura y extrema del mundo, que se iniciará el 3 de enero del próximo año y finalizará el 17. La prueba abrirá la temporada 2025 desafiando las dunas y el terreno peligroso en el desierto árabe.
La carrera arrancará el viernes 3 de enero con el prólogo que se desarrollará en la localidad de Bisha, sobre una extensión de 29 kilómetros.
Daniel y su papá, Wálter, con la disposición de ir por el triunfo.
A diferencia de las anteriores ediciones, Nosiglia decidió dedicar los días previos a su viaje a la preparación con la navegación, con un entrenamiento de dos semanas en los desiertos de Copiapó e Iquique, en Chile, con la idea de “llegar al día de la largada, con ritmo, para que la carrera parezca un entrenamiento”, comentó Nosiglia, quien acudirá a su séptimo Dakar.
Nosiglia, que lucirá el dorsal número 54, será el único corredor boliviano en el Rally Dakar. El competidor viajó con los nervios controlados y con los objetivos claros para completar la carrera más exigente y peligrosa.
“Los problemas mecánicos pueden pasar, son fierros, lo ideal es que no pase. Vamos a tratar como equipo de cuidar la moto, a veces las cosas pasan, no queremos pensar en eso. La idea es terminar el Dakar, no tener errores ni caídas”, añadió Nosiglia, corredor principal del equipo español Rieju.
Por delante, Nosiglia tendrá 14 días en el desierto de Arabia Saudita, de los cuales 12 corresponden a etapas, uno será el prólogo y la jornada del descanso será el 10 de enero en el campamento de Ha’il, luego de la primera semana de carrera.
“Serán días largos, con piedras y terreno peligroso, donde cualquier caída puede afectar la moto y al piloto. Hay que saber dónde acelerar y cuidarse”, apuntó el piloto que viajó acompañado de su padre, Wálter Nosiglia, primero a España, después de una escala aterrizar en territorio árabe entre esta noche o el martes de madrugada.
La Paz/AEP