El viceministro de Defensa de los Derechos del Consumidor, Jorge Silva, explicó a Ahora El Pueblo cómo operan algunos actores políticos para desprestigiar la gestión del presidente Luis Arce a costa del bolsillo de la población.
En entrevista con Ahora El Pueblo, el viceministro de Defensa de los Derechos del Usuario y del Consumidor, Jorge Silva, señaló que el gobierno del presidente Luis Arce debe enfrentar una conspiración política y económica de parte de algunos dirigentes de organizaciones sociales. Dijo que se emplearán muchas estrategias para cuidar el bolsillo del pueblo frente a ello.
—¿Cuál es el origen de los trabajos de control en los mercados del país?
—Bueno, primero debo señalar que hay una preocupación permanente del presidente Luis Arce y del Gobierno respecto a los precios de los productos de la canasta familiar. Eso ha generado la conformación de un Comité de Seguridad Alimentaria, que tiene dentro de uno de sus objetivos controlar los precios de la canasta familiar, de los principales productos de la canasta familiar.
—¿En qué consisten los controles respecto al pan?
—En este caso particular del pan, supimos de algunos rumores en las redes y en algunos medios de comunicación referidos a que el peso del pan de batalla habría disminuido, que estaría con un peso menor al que se anunció, que es de 60 gramos por un precio de 50 centavos.
Entonces, lógicamente frente a esos hechos primero tenemos que verificar el peso y el precio del pan; y de acuerdo a los verificativos que se han hecho en El Alto y en La Paz, se pudo comprobar que el peso del pan de batalla no ha sufrido ningún decremento, es decir se mantiene por encima de los 60 gramos, hay marraquetas de 80, 70, 75 gramos, que es lo normal que se ha encontrado tanto en El Alto como en La Paz. También se ha podido apreciar bastante abastecimiento de pan de batalla y al precio de 50 centavos.
Por otra parte, también tuvimos conocimiento de las declaraciones de un dirigente de El Alto, que promueve la especulación, quien llama a ocultar la harina para evitar un control por parte de Emapa (Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos), pero principalmente para conspirar contra la economía de la población alteña en este caso particular.
No deja de llamar la atención que pese al esfuerzo de artesanos y productores que están elaborando pan a peso y precio justo, existe este tipo de dirigentes que, reitero, responden a una conspiración política económica de la cual hoy está siendo víctima la población boliviana
Son dirigentes políticos que se quieren mostrar o dirigentes políticos que están acatando las instrucciones de otros actores para estrangular la economía del país, y de esta manera desgastar la imagen del Presidente o del Gobierno; y así tener mejores chances las próximas elecciones de 2025.
Entonces, estamos frente a ese contexto, a un año exactamente de las próximas elecciones nacionales que vamos a tener en el país.
—¿Qué acciones concretas se van a tomar respecto a este dirigente?
—Bueno, primero es que estamos pidiendo a Emapa suspenderle la subvención de harina. Este es un panificador que recibía cuatro quintales de harina, de acuerdo con las versiones que tenemos; de un quintal hacía pan de batalla y tres quintales ocultaba, entonces se tiene que cortar esa subvención.
Lo segundo es que vamos a realizar los verificativos a los almacenes que tienen los hornos panificadores.
En tercer lugar vamos a presentar la denuncia por especulación contra esta persona que está incentivando a ocultar la harina con intenciones políticas.
—¿Cuáles serían las sanciones por especulación?
—El agio y la especulación van juntas, porque normalmente uno oculta el producto para luego justificar el incremento del precio del producto.
¿Qué es lo que pretendía este dirigente? Es hacer creer que la harina nacional no es suficiente para la elaboración del pan y justificar la compra de harina argentina que está más cara, y de esta manera solicitar el incremento de precio del pan.
Es decir, ocultan un producto para justificar el incremento de los precios, eso es agio y especulación, que son dos vertientes de las ganancias ilícitas que están sancionadas hasta con diez años de cárcel; el agio, la especulación y el contrabando son delitos de ganancias ilícitas.
Por lo tanto, vamos a presentar en ese contexto esta denuncia para que se investigue, se procese y se sancione a esta persona.
—¿Este es un fenómeno frecuente en los precios de los productos?
—Estamos frente a dos escenarios en la situación actual que estamos atravesando: un primer escenario que se debe a productores, empresarios, industriales que le están poniendo el hombro al país, produciendo productos y que no están incrementando los precios, más allá de lo que normalmente sube un precio.
Hay productos estacionales cuyos precios suben, se mantienen, bajan, vuelven a subir; es decir, es un comportamiento normal. Estamos hablando de carne de res, carne de pollo, carne de cerdo, verduras y frutas.
Hay otros productos que hace varios meses no han incrementado sus precios, por ejemplo el aceite, el fideo y otros.
Hay productos que están congelados sus precios porque son regulados por el Estado, como es el pan, la leche y otros.
Pero hay una gama de productos importados sobre todo contrabando que han incrementado sus precios debido a la crisis global que estamos viviendo.
Foto: Emapa
Entonces, este es un primer componente de una realidad innegable. En el mercado se va a encontrar que el champú, la crema, el desodorante o cualquier producto de limpieza, chileno, brasileño, mexicano, ha incrementado su precio.
Y hay un segundo componente que es la especulación política, económica que va a colgarse de esta coyuntura tratando de instaurar una crisis económica, tratando de instaurar una inestabilidad emocional en la población boliviana y atentando contra la economía del país.
Es así que encontraremos a dirigentes, como este panificador, o dirigentes vecinales u otros actores políticos que van a pedir adelantar las elecciones, las renuncia del Presidente o la renuncia de ministros. Todos estos son parte de la conspiración política. Son políticos que están queriendo aprovechar esta circunstancia para visualizarse, y en otros casos para meter la mano al bolsillo de la población especulando con los precios.
—¿Cómo se enfrenta a estos dos componentes que menciona?
—Frente a estos dos componentes, lo que estamos haciendo es un trabajo coordinado entre diferentes instituciones del Estado a través del Comité la Defensa de la Seguridad Alimentaria, en el cual participan instituciones como las alcaldías, el Senasag, el Sedes, la Policía y el Ejército, es decir, hay un trabajo coordinado para evitar la especulación y el agio, como también el contrabando.
—¿Cómo puede contribuir la población?
—Pedimos a la población que nos ayude con este trabajo identificando los especuladores, denunciando, reclamando, para no permitir que los que están apostando por una conspiración política, económica, o por los especuladores, afecten la economía de los consumidores.
La Paz/AEP