La cantidad es inicial y responde a un convenio que se tiene con la EBIH, que está a cargo de la administración de la nueva factoría.
La Paz, 04 de agosto de 2023 (AEP).- Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB) proveerá unas 2.000 toneladas de cloruro de potasio a la nueva Planta de Producción de Fertilizantes Granulados (NPK), que se emplaza en Cochabamba y cuya construcción culminará este mes.
El presidente de la estatal del litio, Carlos Ramos, informó ayer que la cantidad es inicial y responde a un convenio que se tiene con la Empresa Boliviana de Industrialización de Hidrocarburos (EBIH), que está a cargo de la administración de la nueva factoría.
“Tenemos previsto, en esta primera instancia, entregar a la EBIH, aproximadamente, unas 2.000 toneladas (t) de cloruro de potasio”, explicó Ramos en una entrevista con medios de comunicación estatales.
Agregó que, según el convenio, una pequeña parte de la producción de YLB irá a “alimentar” a la producción de la planta NPK.
Nueva planta
A inicios de julio, la EBIH sostuvo que el emplazamiento de la Planta de Producción de Fertilizantes Granulados NPK, en el Parque Industrial del municipio de Santiváñez, avanza hacia su conclusión para fines de este mes.
La planta tendrá una capacidad de producción de 60 mil t por año de NPK y urea granulada de liberación lenta, dos de los fertilizantes más comerciales y demandados del mundo.
Los fertilizantes NPK son “tipos de multinutrientes para la tierra que contienen determinados porcentajes de nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K)”. Asimismo, la planta producirá urea granulada, que es la “urea revestida con un polímero”, lo que garantiza su liberación lenta que optimiza el aprovechamiento del fertilizante en el suelo.
El presidente de YLB, Carlos Ramos, en conferencia de prensa ayer.
La EBIH indicó que se trata de un proyecto de impacto porque su producción cubrirá el 100% de la demanda de fertilizantes NPK y se prevé exportar los excedentes.
Asimismo, la planta NPK permitirá sustituir las importaciones, que es parte del plan del Gobierno, y tendrá “una serie de efectos multiplicadores en beneficio de la economía”.
En julio del año pasado, el Ministerio de Hidrocarburos y Energías informó que la planta NPK requerirá del trabajo conjunto de la EBIH, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB) para producir los fertilizantes NPK y la urea granulada.
“La planta NPK necesita urea, cloruro de potasio; YPFB y YLB van a ser las empresas que proveerán el material, conjuntamente con las cooperativas productoras de fósforo de Cochabamba”, dio cuenta el titular de esa cartera de Estado, Franklin Molina, en esa ocasión.
Ramos confirmó ayer que se apoyará la producción de la nueva planta, que tendrá “mucho más” valor en el mercado, ya que es un fertilizante usado en casi todos los ámbitos del agro.
“Vamos a apoyar ese proceso de industrialización que está llevando adelante nuestro país para ya no importar NPK; estamos dejando de importar urea porque ya la producimos; estamos dejando de importar potasio porque producimos cloruro de potasio; y ahora, con la EBIH, vamos a dejar de importar NPK”.
Explicó que, de esta manera, se fortalecerá la seguridad alimentaria del país, ya que con la industrialización Bolivia será autónoma en la provisión de sus fertilizantes.
“Cuidar esa seguridad alimentaria es una política de Estado que tenemos que valorar, ahí dejaremos de depender del mercado externo”, destacó el titular de YLB.
Ingresos
El Gobierno estimó que la planta de fertilizantes NPK generará un ingreso anual de Bs 290 millones por la comercialización de las 60 mil toneladas.
Respecto a las bondades del uso de este fertilizante, está el hecho de que incrementará los rendimientos de producción de diferentes cultivos, como las hortalizas, verduras, frutas, trigo, maíz, quinua, papa, arroz, banana, uva, naranja, piña, sandía, pasturas, caña de azúcar, entre otros que se producen en los valles, oriente y el altiplano.
“Lo más importante de esta planta es que vamos a poder fertilizar los suelos; vamos a devolver los nutrientes que los cultivos respiran de nuestros suelos para poder tener un mayor rendimiento”, destacó el viceministro de Industrialización, Comercialización, Transporte y Almacenaje de Hidrocarburos, William Donaire.