La Revolución Democrática y Cultural “emerge desde la profundidad de nuestras raíces y se nutre con la fortaleza del movimiento indígena originario campesino y obrero”, destacó en sus redes.
La Paz, 21 de marzo de 2024 (ABI). – En el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, el presidente Luis Arce reafirmó la importancia de la lucha permanente por la unidad para avanzar en la consolidación de un Estado Plurinacional descolonizado y despatriarcalizado, libre de racismo y toda forma de discriminación.
La Revolución Democrática y Cultural “emerge desde la profundidad de nuestras raíces y se nutre con la fortaleza del movimiento indígena originario campesino y obrero”, destacó en alusión al proceso de inclusión que caracteriza a la nueva Bolivia.
“En el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial reafirmamos nuestra permanente lucha por la unidad para seguir avanzando en la consolidación de nuestro Estado Plurinacional, descolonizado y despatriarcalizado, libre de racismo y toda forma de discriminación”, afirmó en un post en su muro de Facebook.
El 21 de marzo de cada año se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial en homenaje a las más de 60 víctimas mortales en el ataque policiaco de 1960 a una manifestación pacífica contra la ley de pases del apartheid, que se practicaba en Sharpeville, Sudáfrica.
Al proclamar la fecha en 1966, la Asamblea General de las Naciones Unidas instó a la comunidad internacional a redoblar sus esfuerzos para eliminar todas las formas de discriminación racial.
Además de esta fecha, en Bolivia se conmemora el 24 de mayo de cada año como el Día Nacional contra el Racismo y Toda forma de Discriminación, en desagravio a los actos de racismo y discriminación del que fueron víctimas 50 campesinos, por parte de grupos radicales en la ciudad de Sucre, en mayo de 2008.
El objetivo principal de rememorar hechos históricos como el del 24 de mayo de 2008, es el de promover una convivencia ciudadana en la que predominen los valores democráticos de la solidaridad, la tolerancia, el conocimiento mutuo y el respeto a la diversidad, y que se oponga a toda forma de racismo y discriminación.
A raíz de este lamentable acontecimiento, que manchó la historia contemporánea de Bolivia, se promulgó la Ley 139 del 14 de junio de 2011.