El 73% se inclinó por la opción de que la marcha busca evitar el juicio contra Morales y el 44% advirtió que ocasionará una convulsión social.
Para 7 de cada 10 entrevistados por la empresa encuestadora Diagnosis SRL, la marcha evista que llegó este lunes a La Paz sólo busca que Evo Morales no sea juzgado por el delito de trata de personas agravado debido a la relación que mantuvo con una menor de edad cuando era presidente, el año 2015.
La empresa preguntó a 1.800 personas: ¿Con cuál de las siguientes opiniones está más de acuerdo? “La marcha evista es una genuina protesta de las organizaciones sociales demandando soluciones a la crisis económica y liberación de presos políticos”, o “la marcha evista busca evitar el juicio contra Evo Morales por abuso sexual a una menor cuando era presidente”.
El 73% se inclinó por la opción de que “la marcha evista busca evitar el juicio contra Evo Morales por abuso sexual a una menor cuando era presidente”; el 9% indicó que es una protesta genuina de las organizaciones sociales; y el 18% optó por no responder.
Además, el 44% advirtió que la marcha ocasionará una convulsión social en La Paz, frente al 41% que indicó que ésta “pasará desapercibida”.
En el criterio del 63% de los entrevistados la marcha cuenta con “solo pocos seguidores de Evo”; en tanto que el 15% sostiene que hay una “participación masiva”.
Convocada por Morales, la marcha inició en Patacamaya el 10 de enero y la mañana de este lunes arribó a la ciudad de La Paz con el fin de ingresar a la plaza Murillo para entregar al Gobierno nacional su pliego de demandas. No obstante, el centro del poder político de Bolivia mantiene una custodia policial.
Levantan como argumento la situación económica en el país, sin embargo, autoridades, políticos y dirigentes de organizaciones sociales vinculan la protesta con la defensa del expresidente, quien debe presentarse este martes en Tarija para responder en el proceso por la relación que mantuvo con una menor de edad en 2015 con la que habría tenido una hija.
Mientras la marcha arribó a La Paz, los abogados del expresidente, entre ellos Wilfredo Chávez, anticiparon que Morales no asistirá a la audiencia cautelar de este martes, donde se definirá si se defiende en prisión o en libertad, porque no habría sido notificado, a pesar de que desde la Fiscalía se informó que sí se lo hizo y también por edicto.
El 16 de diciembre de 2024, Morales fue imputado por el delito de trata personas agravado debido a la denuncia de haber mantenido una relación con una menor en Yacuiba en 2015. Además, se le impidió viajar al exterior y se ordenó su aprehensión.
Ante esa decisión, la fiscal departamental de Tarija, Sandra Gutiérrez, advirtió que “el juez cautelar será quien defina la situación jurídica” de Morales y de la madre de la presunta víctima, que también fue citada para este martes.
“Lo que establece el Código de Procedimiento Penal es que, si una persona ha sido debidamente notificada y no se presenta, lo que procede es declarar su rebeldía, arraigo y emitir el mandamiento de aprehensión”, señaló la fiscal.
Además, confirmó que la defensa de Morales presentó dos incidentes que serán resueltos antes de la audiencia de medidas cautelares.
Morales se encuentra replegado desde hace meses en el Chapare, su bastión político, justamente después de abrirse la causa por trata de personas. Por el temor a ser aprehendido, no participó en la marcha y quienes quieren reunirse con él deben ir hasta esa zona.
Diagnosis SRL realizó la encuesta el 11 y 12 de enero. Entrevistó a 1.800 personas, entre hombres y mujeres de 18 a 65 años. El error muestral es del +/- 2,31%. Las encuestas fueron presenciales en hogares, en soporte digital.
Se optó por una selección aleatoria simple de zonas censales y de segmentos, y selección sistemática de hogares y de entrevistados.
La Paz / ABI