Gran marcha de unidad. Miles de personas expresaron su repudió contra quienes buscan romper el orden constitucional en Bolivia. El mandatario boliviano fue vitoreado por ser el principal defensor de la democracia.
En medio de vítores de ¡Lucho no estás solo! y con un fuerte respaldo masivo de sectores que se dieron cita en la plaza Murillo de La Paz, el presidente Luis Arce afirmó que el pueblo dará la vida por la democracia, a pesar de que la derecha y el fascismo intentan, con falsos discursos, negar el fallido intento de golpe del 26 de junio.
Sectores de la COB descienden hacia la plaza Murillo.
El rotundo respaldo se reflejó ayer en la Gran Marcha por la Democracia, Unidad y Futuro de Bolivia convocada por el Pacto de Unidad, la mayor alianza de sectores sociales matrices del país, que está a la cabeza de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB) y en la que estuvo presente el Presidente del Estado Plurinacional como uno de los defensores principales de la democracia.
“El pueblo sale a la calle a defender la democracia, hermanos. Eso los golpistas lo tienen que escuchar desde aquí, que el pueblo boliviano no va a dejar pasar a los golpistas, que el pueblo está dispuesto a dar su vida por la democracia” afirmó.
Carteles de apoyo al presidente Luis Arce.
La movilización surge luego de la asonada militar del 26 de junio, cuando una fracción militar ingresó con carros blindados y solados a la plaza Murillo, con la intención de derrocar al gobierno democrático de Luis Arce, elegido con más del 55% de los votos del pueblo en 2020.
Para Bolivia, un país con más de 40 golpes de Estado e intentos de ruptura constitucional registrados a lo largo de su historia, la democracia es considerada un patrimonio y un derecho que costó luto y dolor a los bolivianos. Es más, el 26 de junio trajo a la memoria de los bolivianos lo sucedido en 2019.
Banderas y la wiphala ondeadas en la marcha.
“Los bolivianos que hemos derramado sangre por la democracia, por la libertad, no vamos a dejar que los golpistas pasen”, remarcó.
Minuto de silencio
Durante la concentración en la plaza Murillo se pidió un minuto de silencio en memoria de los mártires de las dictaduras pasadas y las masacres de 2003, de 2019, en especial por la víctimas del régimen de Jeanine Añez (Sacaba, Senkata y Pedregal).
A pesar de estos antecedentes y el último hecho, Arce lamentó que la derecha y el fascismo pretendan encubrir, con “falsos discursos prefabricados, que no hubo un intento de golpe de Estado el 26 de junio en Bolivia.
Sectores del interior del país llagaron a La Paz.
Las organizaciones sociales también cuestionaron a quienes pretenden confundir a la población con un “autogolpe”.
Lucio Quispe, ejecutivo de la CSUTCB, advirtió de que los bolivianos preservarán, con sus vidas, el orden constitucional y defenderán el gobierno de Arce.
Marcelo Mayta, ejecutivo de la Central Obrera Regional de El Alto (COR), aseveró que la verdadera base social y el pueblo no permitirán que se “tumbe” a un gobierno democráticamente electo, en referencia a los políticos de oposición que bloquean créditos en la Asamblea. “Estamos aquí, en el kilómetro cero, para decirles a aquellos que quieren gestar golpes y romper el orden constitucional que no van a poder tumbar a un gobierno democrático”, enfatizó.
Justo Molina, de la Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente de Bolivia (Cidob), dijo: “Venimos a exigir a los golpistas que aprendan a respetar nuestro voto y el derecho de los indígenas”.
Juan Carlos Huarachi, ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), exigió respeto a la democracia y justicia contra los “golpistas” que quieren desestabilizar el país “por envidia”.
