El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo responsabilizó a Morales por los problemas en el país y el bloqueo a los créditos por más de $us 1.000 millones en el Legislativo.
El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, calificó de golpista confeso a Evo Morales por poner en marcha un plan para “destruir la democracia” y le advirtió que “su tiempo ha terminado y sus acciones criminales pronto van a concluir y van a cesar”, en una evaluación de la primera jornada de la marcha de evistas a La Paz.
“Al mundo entero, a la comunidad internacional, le informamos que el señor Evo Morales pasó de ser víctima de un golpe de Estado a ser un golpista confeso que busca destruir la democracia en nuestro país y acabar con la vida de bolivianas y bolivianos para victimizarse, y a través de esos elementos, lamentablemente buscar sentarse -mediante la fuerza- en la silla presidencial”, denunció en conferencia de prensa.
De hecho, el propio Morales reveló en el inicio de la marcha en Caracollo sus intenciones de búsqueda de la dimisión del presidente Luis Arce y del vicepresidente David Choquehuanca, para que asuma la presidencia el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez.
“Si el primer y segundo hombre (del país, Arce y Choquehuanca) abandonan al pueblo, está el tercero hombre del Estado, el hermano Andrónico Rodríguez, con nosotros”, afirmó como parte del plan para asegurar su candidatura, como lo advirtió en mayo de 2024, “por las buenas o por las malas”.
En esa línea, dirigentes evistas como Ponciano Santos y Ramiro Cucho hablaron, por separado, advirtieron con llevar al país a una “guerra civil” y a un “baño de sangre” para conseguir la meta trazada Morales.
De acuerdo con Del Castillo, ese “plan empezó a ejecutarse” este martes con el inicio de la marcha de Caracollo a La Paz, que en su primera jorna sobrepasó con violencia la vigilia que comunarios y cooperativistas instalaron en la localidad de Vila Vila, entre la carretera Oruro y La Paz, con la intensión de disuadir y frenar la movilización.
Al menos 14 civiles y tres policías resultaron heridos, pese a que el viceministro de Cooperativas Mineras, Mauricio Guzmán, llegó hasta el lugar en un intento por entregar a Morales la respuesta a su pliego petitorio y evitar prosiga la marcha y se deben eventuales conflictos.
“Está llenando ya de sangre las carreteras y de luto al pueblo boliviano, solamente por el único interés de satisfacer los apetitos electorales de una persona”, cuestionó Del Castillo y advirtió que el Gobierno actuará frente a estas acciones en apego a la ley.
Responsabilizó a Morales por los problemas en el país y el bloqueo a los créditos por más de $us 1.000 millones en el Legislativo, por lo que le recordó: “Quienes intentaron realizar acciones golpistas estos últimos años, hoy se encuentran tras las rejas”, en alusión a los hechos de 2019, del que paradójicamente Morales fue víctima al obligarlo a dimitir.
“No dudaremos en usar todos los elementos legales que tenemos como Estado para actuar con toda la fuerza de la ley, porque primero está el pueblo boliviano; vamos a cuidar la vida y la integridad de todos y cada uno de los bolivianos”, aseguró en conferencia de prensa.
Informó que todas las pruebas, como las declaraciones del expresidente y sus seguidores serán incluidos en “una carpeta” para, en su momento, presentarla a la justicia y abrir un proceso.
“Nosotros, señor Evo Morales, no nos vamos a escapar como hizo en la gestión 2019, abandonando a todo un pueblo, porque cuando se abandona un pueblo de nuevo viene el luto, el dolor, la sangre, la persecución”, le dijo al expresidente al recordarle que salió del país hacia México en noviembre de 2019, y desde ahí a Argentina.
Dirigiéndose a Morales dijo: “Su tiempo ha terminado y sus acciones criminales pronto van a concluir y van a cesar”.
“A todo el pueblo boliviano le decimos que vamos a protegerlo y las fuerzas del orden van actuar en su defensa como siempre debió ser. Hoy Bolivia va a estar en unidad en contra de esos abusos antidemocráticos”, enfatizó.