La cita judicial Genera Controversia.
La audiencia de medidas cautelares del expresidente Evo Morales, programada para hoy, se desarrolla en un contexto de tensiones y pedidos de sus seguidores para que no se presente ante la justicia.
Morales, quien no se presentó en dos ocasiones anteriores en citaciones judiciales, enfrenta una nueva convocatoria luego de la suspensión de la audiencia del martes, que se debió a su inasistencia y a un certificado médico que alegaba problemas de salud.
El senador y dirigente cocalero Leonardo Loza, en declaraciones a los medios de comunicación (Infobae), instó a Morales y su equipo legal a no asistir a la audiencia. “Yo le diría al hermano Evo Morales y a su equipo jurídico no presentarse el día viernes. Todo puede pasar. Lamentablemente ya no hay el debido proceso. Ya no te puedes defender”, afirmó Loza.
CITACIONES
Ya son varios llamados judiciales que recibe Morales en menos de cuatro meses, relacionados con una investigación por trata de personas, en la que se le acusa por un presunto embarazo de una menor de edad durante su mandato.
La primera citación ocurrió el 10 de octubre, cuando la Fiscalía de Tarija lo convocó para declarar, pero su defensa alegaba falta de garantías para su seguridad.
La segunda citación fue el 14 de enero, pero su abogado presentó nuevamente un certificado médico alegando que Morales sufría de bronconeumonía, lo que le impedía asistir. No obstante, dos días antes, el expresidente participó en su programa de radio y fue visto caminando por la calle con su equipo de seguridad.
EL JUEZ
El juez Nelson Rocabado solicitó una evaluación médica por parte del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) y ha reprogramado la audiencia para este viernes, a pesar de las protestas de la defensa de Morales, que argumenta que no se le ha mostrado el cuadernillo de investigaciones y que el proceso carece de base jurídica.
PROTESTAS
En paralelo, los seguidores de Morales han intensificado las protestas contra el gobierno de Luis Arce.
El 10 de enero, una marcha partió desde Patacamaya, en el departamento de La Paz, hacia la sede de gobierno, recorriendo 98 kilómetros en cuatro días para entregar un listado de demandas a la administración de Arce.
La movilización culminó en enfrentamientos con la Policía, detenciones y denuncias de agresiones a periodistas en las inmediaciones de la plaza Murillo, el centro político de Bolivia.
Situaciones similares se vivieron en Cochabamba, donde los seguidores del dirigente cocalero intentaron recuperar una sede sindical campesina.
Tarija / AEP