En cuatro años se invirtieron más de Bs 900 millones solamente para la construcción de unidades educativas equipadas con talleres y laboratorios.
Luego de un año de gobierno nefasto, en el que se clausuró la gestión escolar debido a la falta de políticas pensadas en la educación de las niñas, niños y jóvenes estudiantes, los bolivianos recuperamos el derecho a la educación gracias a los programas e iniciativas implementadas en estos cuatro años por el presidente Luis Arce.
La clausura de la gestión escolar en 2020 constituyó un atentado al derecho fundamental a la educación de la población estudiantil y significó la pérdida de oportunidades de aprendizajes en el desarrollo de capacidades para la vida.
Con la recuperación de la democracia y la consolidación de un gobierno constitucionalmente elegido, en un contexto de pandemia, el Ministerio de Educación recuperó el derecho a la educación, garantizando su desarrollo de forma permanente y continua a través de estrategias y modalidades de atención educativa (presencial, semipresencial y a distancia) con el apoyo de material educativo (distribución gratuita de textos escolares) y la cualificación docente.
Gracias a esas acciones, ya en 2021 se logró un retorno parcial a las clases presenciales (62%) y en 2022 se llegó al 100%, por lo que ahora la meta del Gobierno es conducir al sistema educativo a una educación moderna, tecnificada y con miras a apoyar el desarrollo industrial que vive el país, para lo que se busca fomentar un enfoque integral que incluya clases prácticas en laboratorios especializados de física, química, biología y otras disciplinas científicas.
En este tiempo, como lo mencionó recientemente el propio Primer Mandatario, se trabajó arduamente para lograr una educación de calidad; claro compromiso es la inversión de más de Bs 900 millones en estos cuatro años para la construcción de 185 obras de infraestructura educativa.
De acuerdo con los datos oficiales, se construyeron 136 nuevas unidades educativas, 31 tinglados para estas instituciones, nueve institutos tecnológicos y nueve infraestructuras complementarias que fortalecen el sistema educativo.
Este trabajo viene acompañado de la entrega gratuita de textos educativos para los niveles de educación inicial y primaria comunitaria y secundaria comunitaria productiva, que sumaron en el último año cerca de 2,4 millones de libros elaborados, impresos y distribuidos, además de apoyar también con materiales educativos en el ámbito de la educación especial.
En cuanto a la educación superior, fueron acreditadas universidades privadas y públicas nacionales al sistema de acreditación regional de carreras universitarias ARCU-SUR, en las carreras de Agronomía y Arquitectura, lo que ofrece garantía pública, entre los países de la región, del rigor académico y científico de la enseñanza.
Programas de Alfabetización
Además de la entrega de infraestructura educativa, el Gobierno también impulsa el proceso de alfabetización destinado a las personas mayores de 15 años. Esta iniciativa tiene la finalidad de desarrollar habilidades primarias de lectura y escritura en las personas iletradas, son los facilitadores de alfabetización que se convierten en guías de este proceso, cuya actividad pedagógica se complementa con la capacitación en la práctica, que llegó a beneficiar, entre 2023 y 2024, a 7.364 personas.
Incentivo al pensamiento lógico-matemático
Siguiendo el lineamiento del presidente Luis Arce, la educación en el país promueve el pensamiento lógico-matemático y lleva adelante actividades como el ajedrez, la Olimpiada Científica Estudiantil Plurinacional Boliviana, entre otras.
Para estas iniciativas, el Ministerio de Educación, mediante distintos programas, impulsa la capacitación constante de las maestras, maestros y docentes del Sistema Educativo Plurinacional, trabajo desarrollado con el fin de que los futuros profesionales contribuyan al país que vive una etapa de industrialización.
La Paz/AEP
