El presidente de la Fejuve paceña, Justino Apaza, exigió justicia y la sanción correspondiente para quienes considera responsables.
La Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de La Paz se declaró ayer en estado de emergencia pidiendo la detención del alcalde Iván Arias, a quien responsabilizan de incumplir sus deberes al no atender las advertencias cuando se hizo el movimiento de tierras que derivó en el deslizamiento en Bajo Llojeta.
Este caso terminó con el fallecimiento de una niña, además de 40 viviendas afectadas y cientos de damnificados. A raíz de este hecho, el presidente de la Fejuve paceña, Justino Apaza, exigió justicia y la sanción correspondiente para quienes considera responsables. “Nosotros estamos en estado de emergencia (…) Este señor alcalde (Arias), quien se va a defender en libertad, debería estar igual que el Alcalde de Achocalla, en la cárcel, por incumplimiento de deberes”, manifestó Apaza ante los medios de comunicación.
Aseveró que Arias no solo no respondió a las alertas que se le enviaron sobre la seguridad de la zona, sino que también se le acusa de no haber hecho un control adecuado sobre las obras que se ejecutaban en la zona. La falta de acción por parte de la autoridad municipal, según Apaza, es un claro ejemplo de negligencia, lo que, a su juicio, lo hace responsable de la tragedia.
Además, el dirigente vecinal cuestionó la actuación de algunos sectores de la sociedad que, según él, se están poniendo del lado del alcalde. “¿Un control social puede defender a un funcionario público? En vez de apoyar a los vecinos que están afectados, aquí están declarando a favor del alcalde municipal, es realmente lamentable cómo juega el alcalde”, expresó.
Indicó que como juntas vecinales seguirán exigiendo justicia por estos hechos.
La Paz/AEP