El canciller de Ecuador, Gustavo Manrique, cuyo país posee una prolífica industria petrolera en la selva, instó a las naciones convocadas a "reinventarse" y abandonar el modelo de "explotación desmedida".
El artista de 78 años, de visita en Londres, negó las versiones surgidas en medios de España y América Latina que lo daban por fallecido.