En una época, la disputa en torno al lugar que ocupaban los colores en el culto religioso motivó profundas polémicas, dejando resultados extraordinarios.
Pese al contexto bélico con Chile y Argentina, el 30 de junio de 1838, el mariscal Andrés de Santa Cruz decretó la creación de bibliotecas públicas en Bolivia, estableciendo un hito en la historia cultural del país.