El país tiene más de $us 3.500 millones.
La Paz, 2 de abril de 2023 (AEP).- La futura Ley de Fortalecimiento de Reservas Internacionales, los créditos que serán aprobados por el Legislativo, la sustitución de importaciones y la industrialización son las cuatro medidas que implementará el Gobierno para el fortalecimiento de las reservas internacionales netas (RIN).
El viceministro de Presupuesto y Contabilidad Fiscal, Zenón Mamani, explicó que la primera medida es la aprobación de la Ley de Fortalecimiento de Reservas Internacionales, que está pendiente desde hace dos gestiones en la Asamblea Legislativa.
Una segunda medida apunta a los créditos que también deben ser aprobados en la Asamblea, indicó.
“Estos créditos provenientes de organismos bilaterales y multilaterales alcanzan a más de 700 millones de dólares que serán destinados a proyectos de inversión”, dijo.
Aclaró que los recursos no serán destinados al gasto corriente, sino dijo que justamente sirven para tener una mayor inversión pública y más recursos para el sector productivo en todas las regiones del país.
Expuso que una tercera medida de fortalecimiento de las reservas es la política de sustitución de importaciones que tiene como objetivo principal, desde su aplicación en 2021, reducir la compra de combustible.
“Vamos a dejar de importar de afuera. Eso nos va a generar divisas porque no vamos a importar de afuera, sino vamos a comprar en el mercado nacional, vamos a comprar al sector cañero que produce a partir de la caña el alcohol anhidro, y eso nos va a permitir un ahorro de más de 100 millones de dólares. Entonces prácticamente es una de las medidas que tenemos que aplicar”, sostuvo.
Desde 2021, conjuntamente con el Ministerio de Hidrocarburos y YPFB, se han emprendido nuevas negociaciones con el sector cañero, que produce etanol. La compra de este recurso ha permitido, con la compra en 2022 de 130 millones de litros, dejar de importar y ahorrar en divisas por lo menos $us 100 millones.
Una cuarta medida, dijo la autoridad, es el tema de la producción gracias a la industrialización, es el caso principal de la urea.
“La urea ha sido un elemento muy importante porque en 2022 hemos exportado cerca de 200 millones de dólares y para este año también va a generar una importante cantidad de recursos que van a entrar a favor del país”, manifestó.
Otro aspecto que hay que tomar en cuenta en este punto —agregó— es la exportación de carbonato de litio, que también es una apuesta con más de $us 57 millones que ya se han exportado el año pasado. Para 2023 se prevén ingresos por más de $us 500 millones.
“Entonces, todo esto nos va a permitir justamente fortalecer las reservas internacionales, nos va a permitir generar ahorro de divisas. No nos debemos olvidar también de la planta del Mutún y biodiésel y NPK. Creo que todos estos son elementos muy importantes para generar divisas al país”, indicó.
En este marco, el viceministro refirió que las reservas superan los $us 3.500 millones y que, de acuerdo con un informe del Banco Central, esta es una muestra de la estabilidad de este fondo, además dijo que la cifra se encuentra dentro de los estándares internacionales de sostenibilidad.
“Por lo tanto, ante ciertas opiniones de algunos analistas que hacen creer que estas reservas se han agotado, pido a la población no hacer caso a esto, ya que solo se está buscando generar zozobra y miedo entre la gente”, indicó.
Ante esto —dijo— el BCB informa periódicamente sobre el estado de las RIN, justamente para evitar la generación de los ataques especulativos que se han presentado en estas últimas semanas.
La Ley del Oro mejorará las RIN
Los términos del proyecto de Ley de Oro de Producción Nacional Destinado al Fortalecimiento de las Reservas Internacionales facilitarán la compra de este mineral y mejorarán la posición de las reservas con los mismos niveles de control y fiscalización actuales, mientras que su monetización está sujeta a determinadas condiciones, con el llamado “oro de buena entrega”, informó en su momento el presidente del Banco Central de Bolivia (BCB), Erwin Rojas.
El proyecto de ley, que se encuentra para su tratamiento en la Cámara de Diputados, busca fortalecer las reservas internacionales netas (RIN).
“Veíamos que era muy importante que parte de la exportación que genera periódicamente nuestro país se pueda quedar en la economía y qué mejor para fortalecer las RIN, para de esa manera garantizar la estabilidad de largo plazo de la economía, apoyar la reactivación y dar la señal de fortalecimiento de las reservas”, explicó a la estatal Bolivia TV.
También aseguró que la Ley 1670 del BCB establece los mecanismos de control y fiscalización para rendir cuentas a los órganos y mecanismos de control que transparentan las operaciones que ejecuta el ente emisor, además de auditorías internas y externas, por lo que descartó que haya “un cheque en blanco”, como denuncia la oposición.
De las “un poco más” de 43 toneladas de oro del BCB, una parte está en bóveda y lo demás invertido, lo que ha generado $us 80 millones de ingresos que fortalecen el patrimonio del ente emisor y apuntalan las políticas sociales del Gobierno, siempre —insistió— en el marco de las normas y controles.
“Si nuestra economía está en un proceso, por algún motivo requiere liquidez, se pueden hacer la transferencia de activos y en este caso iría de oro a lo que serían divisas. Este tipo de operaciones debe entenderse en esa magnitud”, afirmó, y explicó que el oro que “transan” los bancos centrales es el denominado “oro de buena entrega”, resultado de todo un proceso.
Rojas explicó que el oro en los bancos centrales es un “activo más” y, por ejemplo, los entes emisores de Colombia y Chile priorizan la liquidez.
La industrialización generará unos $us 6.300 MM
Con sus variados proyectos de industrialización, Bolivia avanza rumbo a la sustitución de importaciones y proyecta aumentar sus ingresos al menos a $us 6.300 millones con la producción y venta de urea, carbonato de litio y hierro, entre otros.
“Está clarísimo el rumbo que está tomando la economía boliviana, el rumbo es la sustitución de importaciones y una etapa en que se van a poner los cimientos de una economía que va a dar mucho que hablar”, señaló en su momento el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro.
Según la autoridad gubernamental, se prevé que en noviembre de este año la Planta Siderúrgica del Mutún, que se construye en la localidad cruceña de Puerto Suárez, comience a producir sus primeras barras de acero.
La producción y comercialización de barras de acero le permitirán al país tener entre $us 1.000 a $us 1.500 millones por sustitución de importaciones, que implican el ahorro de divisas, y por exportaciones.
Además, el ministro estimó que el país obtendrá un ingreso anual de entre $us 5.000 millones a $us 6.000 millones con la producción industrial y venta de carbonato de litio, considerando que la tonelada de esta materia prima oscila los $us 70.000 actualmente.
De acuerdo con la autoridad, la producción de urea también se incrementará, pues con la primera y segunda planta, una instalada en Cochabamba y la otra en proyecto de construcción, se prevé tener unos $us 300 millones.
A esos importantes proyectos se suman la primera planta de biodiésel, que se prevé que comience a producir en noviembre de este año, y la exportación de electricidad a Argentina, que inició el lunes.
“Sumados estos segmentos, va a cambiar de manera determinante la performance del funcionamiento de la economía nacional (…) Son cosas objetivas que están sucediendo, no son prospectos”, enfatizó el ministro.
En ese contexto, Montenegro resaltó que todos estos proyectos de industrialización con rumbo a la sustitución de importaciones empezarán a dar los primeros frutos de los que el presidente Luis Arce prometió cuando estaba en campaña electoral.
“Nosotros estamos respaldados por el pueblo de Bolivia, el pueblo boliviano que ha tomado una decisión en octubre de 2020 y ha otorgado el 55,1 por ciento de los votos para devolver a la economía del país la esperanza de seguir creciendo, de recuperar la democracia, y nosotros estamos cumpliendo con ese mandato”, afirmó.
