El Presidente aseguró que deja sembrada la semilla de la industrialización mediante plantas industriales que garantizan producción, empleo y mayores oportunidades para los bolivianos.
A menos de dos meses de la conclusión de su mandato, el presidente Luis Arce lanzó un mensaje cargado de alerta política y memoria histórica. Convocó al pueblo boliviano a defender la soberanía y a no permitir retrocesos en los avances alcanzados durante su gestión, que concluye el 8 de noviembre.
El discurso del mandatario cobra especial relevancia en un escenario electoral decisivo: Bolivia acudirá a las urnas el 19 de octubre para la segunda vuelta presidencial, en la que los votantes deberán elegir entre dos proyectos de derecha, el Partido Demócrata Cristiano (PDC) y la alianza Libertad y Democracia (Libre). Ambos bloques ya adelantaron que revisarán las políticas de industrialización, redistribución social y defensa de los recursos naturales impulsadas por el actual Gobierno.
“Que la voz del pueblo cochabambino se levante con fuerza, diciendo que jamás permitiremos que nos quiten lo que hemos logrado, nunca más retrocesos ni claudicaciones en este camino hacia el vivir bien, la justicia social y la industrialización de nuestra patria”, expresó Arce durante la entrega de la fase II de la Línea Amarilla del Tren Metropolitano, en Cochabamba.
“Convocamos a reafirmar nuestro compromiso con la historia y el futuro. Que la valentía de nuestros héroes de la independencia, de las jornadas de la Guerra del Agua (en Cochabamba), nos inspire a defender siempre nuestra soberanía”, agregó Arce.
El mandatario destacó que durante los últimos cinco años su gobierno resistió la adversidad, pero mantuvo su palabra y compromiso firme con el país. Recordó que su administración defendió al pueblo, priorizó a los más vulnerables, protegió los recursos naturales y sentó las bases para el cambio estructural de Bolivia a través de la industrialización.
“Hoy con la frente en alto podemos decir que estamos cumpliendo. Dejamos a Cochabamba hospitales y centros de salud que salvan vidas, nuevas unidades educativas para la formación de nuestros hijos, carreteras y puentes que integran nuestras comunidades, sistemas de riego que alimentan nuestra tierra”, subrayó.
LA INDUSTRIALIZACIÓN
Aseguró que deja sembrada la semilla de la industrialización mediante plantas industriales que garantizan producción, empleo digno y mayores oportunidades para los bolivianos. “No son solo infraestructuras de cemento y ladrillo, son obras que laten en el corazón del pueblo, porque nacen de su lucha y de su esperanza. Sigamos unidos, hermanas y hermanos, construyendo la Cochabamba de nuestros sueños, la Cochabamba que es motor de Bolivia”, señaló.
El Presidente reafirmó que Cochabamba es el granero del país, donde conviven raíces ancestrales y se refleja el esfuerzo constante por construir una Bolivia digna y soberana. Destacó que la fertilidad de esa tierra demuestra la capacidad de producir tanto para los bolivianos como para el mundo.
En medio de la recta final de su mandato y del clima electoral, el mensaje de Arce adquirió un tono de legado y alerta: defender lo alcanzado, evitar retrocesos y mantener viva la idea de una Bolivia soberana e industrializada frente a la posibilidad de un cambio de rumbo político.
Lucho: Lo que construimos será recordado por el pueblo
Durante la entrega de obras, en el municipio de San Benito, Cochabamba, el presidente Luis Arce afirmó que las obras ejecutadas durante su gestión quedarán grabadas en la memoria de las familias bolivianas y ratificó que su gobierno nunca traicionó al pueblo.
“Cuando ustedes caminen esas calles enlosetadas se acordarán de nuestro gobierno y del Movimiento Al Socialismo. Cuando ingresen a los hospitales y a los centros de salud, cuando estrenen viviendas que hemos construido en todos los municipios del país, cuando vean los sistemas de riego y los puentes, todo lo que hemos hecho, se acordarán del gobierno popular, del gobierno del pueblo, porque hemos sido y seremos siempre el gobierno del pueblo y para el pueblo”, expresó Arce.
El mandatario destacó que su administración se caracterizó por trabajar sin descanso y por ejecutar obras que transforman la vida de la gente. “Hermanos, somos un gobierno que ha hablado poco, pero ha hecho mucho. Jamás hemos traicionado al pueblo boliviano. Hemos trabajado, hemos caminado y hemos sufrido junto a nuestro pueblo, porque nosotros también salimos del pueblo”, afirmó.
Arce subrayó que uno de los mayores logros de su gobierno fue defender los recursos naturales y consolidar la industrialización como una política de Estado. “Hemos dado el gran paso de instalar en la cabeza de las y los bolivianos que la industrialización no es cuento, que sí se puede industrializar Bolivia”, agregó.
AEP