El mandatario advirtió de que se busca arrebatar la democracia y el poder al gobierno elegido en las urnas, con el objetivo de controlar los recursos naturales y apropiarse del litio.
El presidente Luis Arce llamó a la ciudadanía a mantenerse en alerta permanente en defensa de la democracia y del Proceso de Cambio. Además, aseguró que el pueblo boliviano no se dejará engañar con supuestas versiones políticas de un autogolpe.
Reiteró, en referencia al fallido golpe de Estado del 26 de junio, la importancia de la vigilancia continua para proteger los logros democráticos y los intereses nacionales del país.
“El pueblo boliviano no está dispuesto a regalar su democracia, que ha costado sangre a todos nosotros”, afirmó el Presidente en el municipio de Santiváñez, departamento de Cochabamba, donde entregó la Ley 1550 de Declaratoria de Red Vial Fundamental de la Carretera de Integración entre Potosí y Cochabamba.
El Presidente recordó cómo al comunicarse con varios dirigentes para alertar sobre los eventos en la plaza Murillo recibió su apoyo y valoró la movilización del pueblo boliviano que rodeó a los militares para repudiar el golpe, lo cual fue un factor clave para que la fractura institucional fracasara.
Reveló que en la operación militar golpista no solo participaron militares en activo, sino también militares jubilados que estuvieron involucrados en el golpe de 2019, además de civiles.
El Jefe de Estado destacó que este no fue solo un intento golpista, sino que también estuvo motivado por intereses en los vastos recursos naturales del país, particularmente el litio, del cual Bolivia posee la reserva más grande del mundo.
“Hay intereses, y hay ojos que están mirando nuestros recursos naturales, nuestros minerales, nuestra agua dulce”, afirmó.
También subrayó que estos intereses buscan arrebatar la democracia y el poder al gobierno democráticamente elegido, con el objetivo de controlar los recursos naturales y apropiarse del litio.
Viceministra Alcón pide investigación responsable
La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, señaló ayer la necesidad urgente de una investigación seria y responsable sobre el complejo caso del golpe de Estado militar fallido del 26 de junio.
“Lo que no debemos hacer es politizar el tema, eso es importante señalar para evitar la impunidad”, subrayó la autoridad de la Presidencia.
“El riesgo de un nuevo intento de golpe siempre está presente”, declaró Alcón, quien reconoció el apoyo recibido tanto a nivel nacional como internacional, incluyendo el informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), y el respaldo de diversas organizaciones y países que repudiaron la sublevación del general Juan José Zúñiga y sus seguidores.
La viceministra agradeció también la presencia de la prensa nacional e internacional durante la cobertura de la operación militar y la movilización ciudadana contra los militares golpistas.
El miércoles, tropas en uniforme de combate y blindados se apostaron por varias horas frente al Palacio Quemado, que comunica con la Casa Grande del Pueblo, sede de la presidencia del Estado, y el despacho presidencial, en el centro de La Paz. En el momento de mayor tensión, uno de los tanques intentó derribar una de las puertas metálicas por las que finalmente ingresó Zúñiga. El Presidente lo encaró en la entrada, nombró una nueva cúpula militar y los militares se replegaron.
La Paz/AEP