La nueva autoridad destacó la necesidad de transformar el sistema judicial con el fin de que los ciudadanos se sientan atendidos con calidad y calidez.
El presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Romer Saucedo, fue posesionado ayer martes e inauguró el año judicial 2025 con el compromiso de construir una “justicia amigable e independiente”.
Durante el acto celebrado en Sucre, Saucedo destacó la necesidad de transformar el sistema judicial para que los ciudadanos que enfrentan problemas legales se sientan atendidos con calidad y calidez.
“Consideramos importante trabajar de manera inmediata en una justicia amigable, donde el ciudadano que tiene problemas, litigios, se sienta atendido con calidad y con calidez. Que visitar las casas judiciales deje de ser un martirio. Otro punto importante es la independencia de poderes, hemos pregonado y hoy hemos jurado ante nuestro señor Jesucristo mantener la independencia del Órgano Judicial”, declaró Saucedo.
De origen chiquitano, Saucedo agradeció el apoyo recibido en las elecciones judiciales de diciembre de 2024, asegurando que no defraudará la confianza depositada por la población, que demanda un cambio significativo en el sistema de justicia.
Nuevos retos
El presidente del TSJ proyectó que en un plazo de seis meses la población podrá percibir las diferencias entre la administración judicial anterior y la nueva.
Este plazo fue fijado por los nuevos integrantes de la Sala Plena del TSJ durante su primera jornada de trabajo, con el objetivo de recuperar la confianza en la justicia, la cual ha sido objeto de críticas en los últimos años.
“En los primeros seis meses se tiene que empezar a ver las diferencias entre la anterior justicia, que ha quedado enterrada el 15 de diciembre, y la nueva justicia que ha nacido. Ese es el plazo que nos hemos puesto para que empiecen a verse resultados”, afirmó Saucedo en entrevista con la prensa.
Las principales tareas definidas incluyen devolver la independencia al Órgano Judicial para que esté sometido únicamente a la Constitución Política del Estado y las leyes, y garantizar una justicia más accesible para el pueblo.
Además se enfatizará en la eliminación de la burocracia mediante el uso de tecnología para evitar que los litigantes deban peregrinar en los juzgados por documentos.
La Paz/AEP
