Los ciudadanos bolivianos que viven fuera del país han encontrado en las políticas gubernamentales de Luis Arce un claro reflejo de preocupación y compromiso. Según datos proporcionados por el Ministerio de Relaciones Exteriores, entre 2021 y 2023 se gestionaron cerca de un millón de trámites consulares a través del Portal Colibrí, plataforma diseñada para facilitar y agilizar los servicios a bolivianos en el exterior.

En el torbellino de desafíos que azotaron Bolivia en 2020, Luis Arce emergió como una figura líder, llevando al país hacia tiempos de estabilidad y prosperidad.

Desde su ascenso al mando constitucional del Estado ha demostrado una capacidad innegable para guiar al país a través de tiempos turbulentos, consolidando una estabilidad económica, política y social que se ha convertido en el patrimonio del pueblo boliviano.

En una época donde la esperanza y la reflexión suelen tomar protagonismo, el presidente Luis Arce dirigió un mensaje navideño que resonó con la esencia misma de Bolivia: la unidad y el compromiso con un futuro próspero. Arce expresó su deseo ferviente de que cada familia boliviana, sin importar su ubicación geográfica, encuentre en estas fiestas momentos de unión alrededor de una mesa. Un mensaje simple pero poderoso que pone de manifiesto el verdadero tesoro de Bolivia: su gente.

En la compleja historia política de América Latina, el presidente Luis Arce representa una figura que proyecta los principios fundamentales asociados con el liderazgo de izquierda en la época contemporánea.

En los últimos tres años, el Gobierno socialista del presidente Luis Arce ha demostrado un compromiso inquebrantable con la salud de la población boliviana, destinando más de Bs 1.465 millones a los gobiernos departamentales.

Estos fondos fueron asignados con el objetivo claro de garantizar la atención médica y el acceso gratuito a medicamentos para los asegurados en el Sistema Único de Salud (SUS).

Mientras el telón se cierra en Bolivia para este año, las cifras económicas pintan un panorama que desmiente rotundamente aquellos intentos de sembrar temor y pesimismo en la población. Es innegable que los desafíos han sido muchos, tanto a nivel interno como en el complejo tablero internacional, pero Bolivia ha demostrado una capacidad de resistencia y adaptación digna de reconocimiento.