A comienzos del siglo XX, Uncía y Llallagua fueron escenario de una feroz disputa entre tres poderosas empresas mineras. En medio de litigios, innovaciones tecnológicas y conflictos laborales, Simón I. Patiño se consolidó como el ‘Rey del Estaño’.
Desde 2001, la estética y la política de la Familia Galán marcaron las marchas LGBTI+ en Bolivia. En 2025, su legado se hace presente en cada bandera arcoíris, cuerpo transformado y grito de libertad.