A propósito del Día de la Niña y Niño Boliviano, celebrado ayer, un grupo de pequeños artistas demuestra que la solidaridad no tiene edad ni límites.
El Museo Nacional de Etnografía y Folklore se convierte este mes en el escenario para celebrar la riqueza sonora de Bolivia con conciertos gratuitos, una invitación a redescubrir los territorios a través de la música.